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LA PIZARRA | Eurocopa 2004 | República Checa-Grecia, el análisis de un experto
Columna
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El carácter ganador y el frontón

La República Checa parte como favorita porque ha finalizado con victorias sus cuatro partidos de esta Eurocopa y está mostrándose, por el momento, como la selección más fuerte y segura. Juega de forma alegre, con una capacidad de trabajo muy grande del mediocampo hacia delante, y lo hace con un solo jugador en el puesto de pivote, Galasek, un hombre de buena calidad, con cierto parecido a Guardiola, que se sirve de los apoyos permanentes de Nedved, Rosicky, Poborsky y, por momentos, Koller. La movilidad y la fortaleza de Nedved, capitán y líder del equipo, transmiten al resto de sus compañeros un carácter ganador.

- El frontón griego. Aunque sean los favoritos, los checos se van a encontrar con un rival, Grecia, que juega con un repliegue intensivo en el que participan bastantes hombres y que deja muy pocos espacios al adversario. La presión de sus centrocampistas va a hacer difícil a la República Checa alcanzar posiciones de remate. Los griegos estarán a expensas de las oportunas apariciones de su delantero Charisteas. Los checos pueden encontrarse con un frontón muy difícil de superar y probablemente la mejor manera de atacarlo con eficacia será buscar a Koller.

- La importancia de Dellas.

Para ocuparse de Koller e intentar pararlo, los griegos tienen a Dellas, hombre alto y líder de la defensa. Pero, si Dellas se preocupa de Koller, Grecia puede quedar un tanto mediatizada en la salida de la pelota desde atrás, una labor que suele dirigir ese futbolista, central del Roma. Grecia también acumula gente y presiona mucho en el medio del campo. Por entrega o por acumulación, debe superar el gran trabajo físico que están desarrollando los centrocampistas checos, especialmente Poborsky y Rosicky, ayudados por Koller con desmarques de apoyo. Ese trabajo ha sido lo que ha dado a la República Checa la capacidad de manejar las diferentes situaciones que se le iban presentando.

- Altura y calidad. Con sus más de dos metros de estatura, Koller no es un jugador torpe, sino que muestra bastante habilidad. Ha marcado goles y ha dado asistencias, como la que facilitó con el pecho a Baros y que supuso el tanto de la victoria sobre Holanda. De haberlo realizado otro jugador con más fama, se lo habrían recordado muchas veces las televisiones, las radios y los aficionados. Domina el juego aéreo y el disparo y la preocupación que siembra en la defensa adversaria facilita que Baros saque provecho con su rapidez. Da pases y es generoso en la presión y las ayudas defensivas. Tiene mucho peligro en las jugadas de estrategia ofensiva. Gran jugador de equipo.

- El complemento de Baros. Futbolista joven y rápido, Baros se complementa perfectamente con Koller porque posee las virtudes de las que carece éste. Puede ser una revelación y creo que se consolidará en el futuro tanto en el Liverpool como en la selección checa.

- Seleccionadores con recorrido. Puede que sea casualidad o no, pero los seleccionadores de los cuatro equipos que han llegado a las semifinales son hombres que han tenido un recorrido anterior en clubes durante muchos años y generalmente con éxitos. Por tanto, todos acreditan una experiencia que están poniendo de manifiesto en los partidos de esta Eurocopa. Luiz Felipe Scolari (Portugal), Karel Brückner (República Checa), Otto Rehhagel (Grecia) y Dick Advocaat (Holanda) han vivido en sus carreras momentos más delicados que éste y probablemente han podido sortear la presión del campeonato con inteligencia y suerte, pero también como resultado de la experiencia acumulada durante sus largas trayectorias profesionales.

Koller (en primer plano), seguido por Rosicky y Huebschman.
Koller (en primer plano), seguido por Rosicky y Huebschman.REUTERS

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