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La Audiencia condena a 17 y 8 años a dos de los secuestradores de Aldaya

Ramada y Yoldi participaron también en el secuestro de Delclaux

La Audiencia Nacional ha condenado a Francisco José Ramada Estévez a 17 años de prisión por el secuestro del industrial José María Aldaya, quien permaneció en poder de ETA desde el 8 de mayo de 1995 hasta el 13 de abril de 1996. Su compañera sentimental, Sagrario Yoldi Múgica, ha sido condenada a ocho años de cárcel como cómplice, al haberse encontrado una huella suya en el local del secuestro.

José María Aldaya fue secuestrado por varios etarras, entre ellos dos identificados como Santi y Tere, cuando se dirigía a su domicilio tras haber salido de la empresa de transporte Alditrans, de la que era director y prácticamente propietario. Su vehículo fue interceptado en un camino de la urbanización en la que residía, por otro del que se bajaron los etarras, que le obligaron al industrial a ponerse un capucha y acostarse en la parte trasera del vehículo de los asaltantes, donde le pusieron una inyección que le durmió.

Aldaya fue conducido a una nave industrial en el polígono Gaviria número 38, de Irún (Guipúzcoa), alquilada al efecto por Francisco José Ramada con dinero facilitado por un jefe de ETA, y en la que, con ayuda de Santi y Tere, había construido un habitáculo de tres metros de largo por 1,90 de ancho y 1,95 de alto.

El industrial permaneció recluido casi un año en el zulo, que no tenía otro hueco que la puerta de entrada y en el que únicamente disponía de un colchón, una mesa, una silla de acampada y un cajón para las evacuaciones fisiológicas.

Los etarras Tere y Santi vivieron en la nave hasta que recibieron la orden de liberar a Aldaya. Ramada suministraba los alimentos y llevaba a su casa la ropa de Aldaya para lavar -le habían suministrado tres mudas-, a la vez que actuaba de correo entre Santi y Tere y ETA.

Sagrario Yoldi Múgica, que vivía con Ramada como compañera sentimental, lavaba la ropa que su compañero traía a casa procedente del zulo. Yoldi declaró en el juicio que no tuvo nada que ver con el secuestro, pero el tribunal explica que su afirmación de que nunca estuvo en el zulo queda desmentida por el informe dactiloscópico sobre una huella de la acusada encontrada en ese local.

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El industrial fue liberado en la noche del 13 al 14 de abril de 1996 en un monte cerca del alto de Azkarate.

Ramada y Yoldi han sido condenados también a indemnizar a Aldaya con 1.202.000 euros (200 millones de pesetas) "por los enormes perjuicios morales que lleva consigo un cautiverio como el del presente caso". Anteriormente, ya habían sido condenados a 14 años y 8 años de prisión, respectivamente, por su participación en el secuestro del abogado Cosme Delclaux, entre 1996 y 1997.

Por otra parte, el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón procesó ayer a 20 presuntos integrantes y colaboradores de ETA, pertenecientes al subaparato de "captación" denominado Arrantza y de "información" llamado Pianistas.

Entre las vigilancias realizadas por los procesados figuran las de un subinspector de policía de Pamplona; el concejal de UPN Ignacio Polo, de Lizaso (Navarra), y un sobrino del lider del PP vasco Jaime Mayor Oreja.

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