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Entrevista:MANUEL COPETE | Director de la Bienal de Flamenco de Sevilla

"La Bienal se vende por sí sola en el mundo entero"

Margot Molina

Dice estar en política "desde que me conozco", lo que traducido a una fecha supone 1970 y a un partido: el PSOE. Manuel Copete nació en La Puebla de Cazalla (Sevilla) hace 49 años y ha pasado por casi todos los despachos de la Diputación de Sevilla. El último y el de más larga duración, desde 1996 hasta 2003, ha sido el de vicepresidente primero. El alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín, lo nombró a principios de este mes director de la Bienal de Flamenco de Sevilla. Pero lo que tiene revolucionado al mundo de la cultura sevillana es su designación como presidente del Consejo Metropolitano de la Cultura y las Artes de Sevilla, una propuesta del Ayuntamiento para coordinar las políticas culturales de todas las Administraciones públicas, las fundaciones y las iniciativas privadas.

"El festival no es sólo flamenco, también es turismo, comercio, discográficas, diseño..."

Pregunta. ¿Qué es el Consejo Metropolitano de la Cultura y las Artes de Sevilla?

Respuesta. El Ayuntamiento encargó a un grupo de expertos, dirigidos por Manuel Marchena, un plan director que indicara las líneas de trabajo en políticas estratégicas y una de ellas es la cultura. La creación del consejo es una recomendación de ese plan que considera necesaria una coordinación de la programación que se realiza en el área metropolitana de Sevilla (hablamos de 1.100.000 personas) tanto por las Administraciones públicas como por entidades privadas.

P. ¿Y cómo se materializará esa coordinación?

R. Por ejemplo, rentabilizando la red de teatros que hay en la provincia, que actualmente incluye 13 espacios, y que podían abaratar costes y dar una mejor atención al público si los espectáculos se representan en varios espacios de la red. Muchos de esos teatros de Alcalá, Carmona, La Rinconada, Los Palacios o Lebrija podrían albergar cualquiera de los montajes que se ofrecen en el teatro Central, el Lope de Vega o la sala pequeña del Maestranza. Otro ejemplo sería el que el ciclo de los conciertos de piano que ha venido realizando la Fundación El Monte en su espacio pudiera ofrecerse en el Maestranza, un espacio adecuado por la calidad de los conciertos y que permite una mayor afluencia de público.

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P. ¿Cuándo se pondrá en marcha?

R. En septiembre entregaremos a todos los municipios, Administraciones y entidades un documento explicando en qué consiste el proyecto. El trabajo lo realizará un consejo asesor, no ejecutivo, que yo presidiré. El Consejo Metropolitano no es cuestión de imponer ideas; sino de llegar a acuerdos entre todos para que los ciudadanos dispongan de una oferta cultural más amplia y, en algunos casos, más barata porque se podrán reducir costes.

P. La consejera de Cultura, Carmen Clavo, se ha negado a la propuesta del Ayuntamiento de que el presidente del Consorcio de teatro de la Maestranza, que hasta 2005 es usted, asuma funciones de gestión.

R. No queremos controversia con nadie. Lo que planteamos es que el modelo actual no funciona. El Ayuntamiento ha planteado su idea, ahora el resto de las Administraciones pueden aportar las suyas.

P. ¿Se ha planteado el nuevo consejo la fusión del Festival de Cine y Deporte de Sevilla y de los Encuentros de Música de Cine?

R. El ámbito del deporte se le ha quedado corto al festival, que desde enero de 2004 estará vinculado al Ayuntamiento, pero Sevilla no puede permitirse el lujo de tirar un evento que funciona. Habrá que considerar su vinculación a otro género y acercarlo al Encuentro de Música de Cine, que organiza la Diputación pero que no es la más adecuada para mantenerlo y tiene problemas presupuestarios.

P. ¿Cuáles son sus prioridades al frente de la Bienal de Flamenco?

R. Lo primero es conseguir una entidad jurídica propia, que la Bienal no sea un apéndice de ningún área del Ayuntamiento que tiene una estructura administrativa anquilosada. Una estructura de sociedad que le permita convertirse en una entidad mixta en la que los patrocinadores privados tengan voz y voto. Lo segundo, será sacar la Bienal al extranjero con giras de las producciones propias, que es nuestro tercer objetivo.

P. Pero todo eso se traduce en euros, ¿cuánto se incrementará el presupuesto?

R. La edición anterior, la 12ª que fue todo un éxito de público con casi 100.000 espectadores, contó con un presupuesto de 1.610.700 euros. Lo que necesitaríamos para empezar con las producciones propias son unos 360.000 euros más, que no tienen porque salir de las arcas públicas. La Bienal se vende por sí sola en el mundo entero, así que a cualquier empresa le puede interesar los patrocinios. El festival no es sólo flamenco, también es turismo, comercio, ventas discográficas, diseño...

P. ¿No le da miedo tomar decisiones artísticas?

R. No, ¿por qué? La Bienal es un mecanismo que está en marcha y, hasta ahora, con magníficos resultados. Para las cuestiones artísticas existe un comité asesor que se ampliará ahora con los anteriores directores de la Bienal.

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Sobre la firma

Margot Molina
Ha desarrollado su carrera en El PAÍS, la mayor parte en la redacción de Andalucía a la que llegó en 1988. Especializada en Cultura, se ha ocupado también de Educación, Sociedad, Viajes y Gastronomía. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Ha publicado, entre otras, la guía de viajes 'Sevilla de cerca' de Lonely Planet.

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