La Feria del Libro de Málaga tributa un homenaje a la revista 'Caracola'
Los libros han vuelto a tomar el Parque de Málaga. Ayer se inauguró la XXXIII Feria del Libro, que reúne, hasta el 8 de junio, a libreros, editores, escritores, lectores e instituciones en torno a 47 puestos. Este año se ha editado un número especial en memoria de la revista de poesía Caracola, fundada a finales de los cincuenta. También se exhibe, en el Rectorado de la UMA, una muestra sobre la publicación gracias a los fondos del Centro Cultural de la Generación del 27.
"Las personas somos el producto de nuestras lecturas (...) Cuando eres niño los libros te enseñan el espíritu de la aventura, cuando eres adolescente conforman la identidad y la comprensión del mundo y cuando eres adulto te permiten entender mejor la realidad que te circunda y el proceso histórico en el que estás viviendo", dijo el escritor Guillermo Busutil en el pregón.
La importancia cultural y económica para el sector de los libreros, que agrupa en una asociación a más de 130 empresas en la provincia, hacen de esta feria una cita imprescindible. La organización, como ya es tradicional, apuesta por el fomento de la lectura infantil. Ludoteca, biblioteca infantil, cuentacuentos y un taller de encuadernación son algunas de las actividades pioneras de esta feria que se han exportado a lugares como la de Madrid.
"Fuimos los primeros en ofrecer actividades no comerciales. Quisimos hacer una feria lúdica, para fomentar la lectura entre los más pequeños", afirma María del Carmen Moreno, presidenta de la Asociación de Libreros de Málaga. Andrés Neuman, Vicente Luis Mora, Gómez Yebra, Jean Moreau y Miguel Romero Esteo presentarán sus últimas obras en Málaga estos días.
