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AMENAZA DE GUERRA | La movilización ciudadana

Más de 200 intelectuales llaman a la movilización para detener la guerra

Pujol dice sentirse "impresionado" por la actitud antibelicista de los catalanes

Más de 200 personas del mundo de la universidad, de la cultura y del espectáculo han firmado el manifiesto No en nuestro nombre, que pide a la sociedad catalana un esfuerzo para detener la guerra y mostrar el rechazo a la "insensatez" del presidente del Gobierno, José María Aznar, "que quiere llevar al país a la guerra pese a la oposición nítida de la mayoría de los ciudadanos". El mismo presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, admitió ayer en el Parlament sentirse "impresionado" por la actitud antibelicista de los catalanes, una cuestión, dijo, "que está por encima de los partidos, que no son lo importante".

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Jordi Pujol dejó ayer claro en el Parlament que no asistirá a la manifestación -tal como se lo habían reclamado Pasqual Maragall y Rafael Ribó- por "coherencia" con su trayectoria - "ni los presidentes ni los primeros ministros irán a las manifestaciones", explicó-, pero la marcha se prevé multitudinaria. Tiene el apoyo de cuatro de los cinco grupos parlamentarios -todos salvo el PP- y de decenas de organizaciones sociales, que ya demostraron su capacidad de convocatoria con la marcha antiglobalización de marzo del año pasado, a la que asistieron más de 300.000 personas.

El mundo de la cultura y de la universidad se ha movilizado a última hora y ha impulsado el manifiesto No en nuestro nombre, que en pocos días ha logrado reunir más de 200 firmas. El primer firmante es el historiador Miquel Batllori, el erudito jesuita fallecido el pasado domingo. Entre los firmantes se encuentran también Oriol Bohigas, Raimon, Jordi Solé Tura, Rosa Regás, Jorge Herralde, Rosa Novell, Carme Molinero, Josep Maria Fradera y los grupos musicales Dusminguet y Antònia Font.

El documento se muestra muy crítico con el Gobierno español, con el concepto de guerra preventiva -la argumentación política sobre la que la Administración de EE UU justifica un eventual ataque- y con el régimen de Sadam Husein.

El conflicto de Irak ocupó la mayor parte de la sesión, ayer en el Parlament, de control al Gobierno. Los socialistas, Iniciativa y el PP -aunque por distintas razones este último- reclamaron a Pujol una postura clara respecto a una posible intervención armada en Irak. "Le ruego que se moje personalmente y Cataluña sepa que sus dirigentes sí saben y contestan", le espetó desde la tribuna el candidato socialista, Pasqual Maragall. Pujol recordó que no suele acudir a este tipo de manifestaciones y se mostró especialmente molesto cuando el dirigente de ICV, Rafael Ribó, le recordó la celebrada en su apoyo por el caso Banca Catalana.

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Alberto Fernández Díaz, del PP, consideró ilógica la ausencia de Pujol en la protesta dado que sus compañeros de filas Josep Antoni Duran Lleida y Artur Mas sí asistirán.

Las gigantas que desfilaron ayer en las fiestas de Santa Eulàlia, mostrando la banda contra la guerra en la plaza de Sant josep Oriol de Barcelona.
Las gigantas que desfilaron ayer en las fiestas de Santa Eulàlia, mostrando la banda contra la guerra en la plaza de Sant josep Oriol de Barcelona.

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