Fotos inéditas de Bernard Plossu abren una nueva colección editorial
Un fotógrafo prestigioso como Bernard Plossu, del que se publican fotografías inéditas realizadas a lo largo de los últimos 40 años; un profesional de la fotografía de moda y la publicidad, Álvaro Villarrubia, del que se edita por primera vez una monografía que incluye también su obra más personal; y un estudio de fotografía tradicional, FotoRamblas, del que se recoge una selección de retratos realizados a lo largo de muchas décadas. Son los tres libros con los que se presenta la nueva colección de fotografía de T. F. Editores, dirigida por Rafael Doctor y que pretende hacerse un hueco en el panorama editorial de la fotografía desde una perspectiva abierta.
'La manera poética de mirar de Plossu tuvo una gran influencia entre los fotógrafos españoles, casi más que entre sus compatriotas franceses', afirmó ayer Rafael Doctor durante la presentación de la colección en Barcelona. 'Para el libro Forget me not (inédito) hemos seleccionado obras de todas las épocas que mantienen su estilo, pero aportan nuevas miradas y ninguna se había publicado antes'.
Si la recuperación de imágenes inéditas de fotógrafos reconocidos es una de las líneas editoriales de esta nueva colección, otra lo es la publicación de primeras monográficas de autores aún no conocidos por el gran público o que, como es el caso de Álvaro Villarrubia, no han recibido aún el reconocimiento del mundo artístico. De Villarrubia se ha publicado Crash, una monografía con textos de Alaska y Alejandro Amenábar que recoge tanto sus trabajos en publicidad y moda como su obra más personal.
La estrella
De momento, sin embargo, la estrella de la colección no es un libro de autor, sino una selección del archivo de un estudio de fotografía tradicional: FotoRamblas. Boxeadores, luchadores, variétés y otras imágenes de un estudio de Barcelona (1956-1985). El archivo del estudio, que se mantuvo en funcionamiento entre 1947 y 1999, lo conforman ahora unos 1.300 negativos que han pasado a ser propiedad del artista Santos Montes, quien se confiesa fascinado por los mundos de estas imágenes. El propietario del establecimiento, José Mas, y el último de los fotógrafos que lo dirigió, José María Cives, recordaban, sin embargo, que, si no se hubieran reciclado las placas y los negativos, el archivo habría podido tener hasta 300.000 negativos. 'En los años cincuenta y sesenta venía gente de toda Barcelona a retratarse', recuerda Cives. 'Gente humilde, en ocasiones emigrantes que querían enviar sus retratos a la familia. Ahora, en los últimos tiempos, con los paquistaníes que viven en el barrio, pasaba lo mismo. Me recordaba mis inicios'.
Para Doctor, con este libro se pretende rendir homenaje 'no sólo a un estudio concreto, sino a los miles de estudios que trabajan de manera anómina y honesta la fotografía'. La colección incluirá también libros temáticos.
