Meta4 cambia de manos
Joaquín Moya deja la presidencia y la compañía logra su primer beneficio operativo en seis años
Seis años se ha pasado Meta4, la primera empresa española de programas informáticos, con números rojos en sus cuentas. Después de una durísima reestructuración, la compañía acaba de anunciar sus primeros beneficios operativos desde 1996 y, tras conseguirlo, su presidente, Joaquín Moya-Angeler, ha dejado el mando en manos del holandés Loek van den Boog.
Los ingresos también han sufrido. Meta4 ha facturado 10,5 millones de euros en el segundo trimestre, frente a los 14,4 millones de 2001
La compañía ha pasado de invertir el 40% de las ventas en I+D al 20%, y ha recortado la tercera parte de su plantilla
'Hemos cruzado la línea'. Enrique Gamazo, consejero delegado de Meta4, expresa así la satisfacción del equipo gestor de la compañía de software porque ha conseguido cerrar el segundo trimestre del año en EBITDA (beneficios antes de intereses, impuestos, depreciaciones y amortizaciones) positivo, frente a las pérdidas de 1,2 millones de euros del primer trimestre. El equilibrio financiero supone, además, que Meta4 da por finalizado el duro proceso de reestructuración que inició tras su frustrada salida a la Bolsa española, en julio de 2000.
La compañía lleva 10 años desarrollando programas informáticos de gestión de recursos humanos y es el líder en este mercado en España. Pero ha sufrido mucho en los dos últimos años. Cerró 2000 con unas pérdidas de 24 millones de euros, después frenó la salida a Bolsa, sólo dos días antes de que fuera a producirse, y comenzó 2001 con un duro plan de reestructuración. Sus dos socios financieros, los fondos General Atlantic Partners (GAP) y Excel Partners, inyectaron en enero 25 millones de euros, y eligieron al holandés Loek van den Boog como consejero delegado y el encargado de reestructurar la empresa.
Desde el año pasado, la compañía ha recortado sus gastos en un 51%. Pasó de invertir más del 40% de su facturación en I+D a un 20%, y recortó una tercera parte de su plantilla, hasta los 500 empleados que tiene ahora. 'Hemos logrado que la maquinaria funcione gastando la mitad', asegura Enrique Gamazo, que fue nombrado consejero delegado de la compañía en marzo.
Pero los ingresos también han sufrido. Meta4 ha facturado 10,5 millones de euros en el segundo trimestre, frente a los 14,4 del mismo periodo del año anterior y los 10,9 de los primeros tres meses de 2002. La compañía niega que este descenso en los ingresos esté relacionado con su drástico recorte en inversiones y plantilla ya que, según asegura Gamazo, Meta4 no ha perdido cuota de mercado en este periodo, e incluso ha ganado clientes, como la filial de Vivendi Générale des Eaux, en Gabón; Caixa Geral-Sogrupo, en Portugal, y Torras Papel, Pzifer y Endesa, en España. La empresa explica que la caída en ingresos está relacionada con la fortaleza del euro, ya que realiza el 60% de su facturación fuera de España, y la crisis argentina. Meta4 ingresaba el 10% de sus ventas en el país latinoamericano. Ahora, la cifra ronda el 2%. La empresa ha reducido, además, su participación en Emplaza, la joint-venture que creó con Terra Lycos en junio de 2001, a un 20% del capital.
La radiografía de los resultados del segundo semestre muestra también que la compañía tiene 1,5 millones de euros en cash flow -en el mismo periodo de 2001 tenía un flujo negativo de 8,3 millones-. Este incremento de la liquidez se debe a que Meta4 ha conseguido mejorar sus plazos de cobro de 160 días a 120, y aumentar sus márgenes por prestación de servicios (del 29% del año anterior al 35%).
Cambios en el consejo
Esta mejora en los resultados financieros, en fin, ha llevado a Joaquín Moya-Angeler, presidente de Meta4 desde 1999, a dejar su cargo. Moya fue contratado en una época de expansión y crecimiento. Según asegura, ahora que ha cumplido con su principal objetivo -que la compañía 'recorriera con éxito el camino a la rentabilidad'-, deja su puesto en manos de Loek van den Boog, que ocupaba el cargo de vicepresidente. Van den Boog ha pasado por casi todas las fases de la gestión -inversor, consejero, consejero delegado y presidente-. Termina una época, lo que se refleja también en el cambio en el consejo de la compañía. Salen tres de sus antiguos consejeros -Isabel Aguilera, Miguel Canalejo y Ángel Picaza- y los dos socios, que ya tienen un 80% del capital, toman posiciones. David Bendel, representante de Excel, es nombrado vicepresidente, y en el consejo continúa Tom Tinsley, socio de GAP. Enrique Gamazo sigue en su puesto como consejero delegado.
Lo que no cambia es la pésima marcha del valor en el mercado Nasdaq Europe, donde cotiza desde 1999. La compañía ha perdido un 62% de su valor en el año y un 97% desde que salió a Bolsa. 'Yo diría que, ahora mismo, Meta4 es un chollo', comenta Gamazo.
El consejero delegado de Meta4 quiere dejar claro que, aunque la vuelta al equilibrio es una buena noticia, no es un objetivo en sí mismo. La idea ahora es, desde el punto de vista financiero, terminar 2002 en beneficios y, en el terreno del negocio, aumentar los ingresos buscando nuevas líneas de productos y países. Pero controlando los gastos. La compañía se está centrando en el llamado negocio ERP, que son los programas informáticos que facilitan las relaciones entre la empresa y sus empleados. En cuanto a los mercados, Meta4 busca entrar en nuevos países como Perú o Brasil de la mano de socios locales, una estrategia menos cara y arriesgada que abrir oficinas propias. La idea general es, según Gamazo, 'mirar y planificar para poder ejecutar en cuanto haya la más mínima señal de recuperación'.
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