_
_
_
_
_

Corcóstegui declara que acordó junto a Sáenz la recompra a KIO de acciones del Vizcaya

La orden fue impartida a ambos ejecutivos por Pedro Toledo

Ángel Corcóstegui, que fue consejero y director general del BBV, testificó ayer ante el juez Baltasar Garzón que instruye el caso BBV, que el entonces presidente del Vizcaya, Pedro Toledo, les encargó a Alfredo Sáenz y a él mismo que acordasen con KIO el precio para la recompra de las acciones del banco. Ambos lo hicieron y fijaron el precio de la acción en el que tenía en Bolsa el día del acuerdo, el 18 de octubre de 1987.

Más información
El PP quiere personarse en el 'caso BBV' para implicar al PSOE
Los secretos de las cuentas del BBV en Puerto Rico
El manual del BBV Privanza ofrecía hasta 12 productos para dinero 'opaco'
Garzón investigará la sociedad Gentar, en la que fue apoderada una hija de Emilio Ybarra
Gráfico:: Los fondos ocultos del BBVA
Dossier 5Días:: El 'caso BBVA'

Corcóstegui dijo que varios equipos intervinieron en la operación y que ni Sáenz ni él, que formaron el equipo para negociar el precio de la acción, tuvieron participación o conocimiento de la creación de las sociedades de Jersey. El testigo negó en un primer momento, aunque luego dijo no recordar, que hubiera recibido una orden expresa del presidente de BBV Emilio Ybarra para que vendiera las acciones de autocartera. Sin embargo, precisó que el núcleo de su actividad era la venta de acciones, por lo que es posible que gestionase su venta, aunque dijo que no lo recordaba.

Respecto a la mala contabilización de unas pérdidas de 100 millones de dólares en unas operaciones de permutas de divisas, Corcóstegui dijo que él se ocupaba de las grandes cifras, pero que quizá el banco aprovechó su marcha en 1994 para cambiar los criterios de contabilidad. Agregó que no le sonaban los nombres de la fundación (Candiac primero y Amelán, después) que enjugaron parte de las pérdidas.

Toledo e Ybarra

Por su parte, José Luis Segimón, asesor jurídico del Banco de Vizcaya y posteriormente del BBV hasta su jubilación, declaró ayer como testigo durante una hora y media. Refirió la operación de recompra de las acciones en poder de KIO y explicó que fue el fallecido presidente del Vizcaya Pedro Toledo quien en 1987 inventó un procedimiento para crear un patrimonio autónomo en Jersey para soslayar la prohibición de comprar acciones propias. Se creó una estructura de sociedades participadas entre sí -Abreveux, Ballintrue, Coriander y Darjon- financiadas por terceros -la Unión de Bancos Suizos- que ostenta un patrimonio autónomo para adquirir las acciones de KIO. Toledo, sin embargo, estimó que el patrimonio no podía ser tan autónomo y nombró a consejeros del Vizcaya como administradores y consejeros de las cuatro sociedades citadas.

Tras el nombramiento de Emilio Ybarra como presidente del BBV, éste informó a Segimón de que había consultado con abogados externos al banco y que le habían indicado que había que cambiar la figura de las cuatro sociedades en Jersey por una fundación en Liechtenstein, que se llamó primero Candiac y luego Amelán, que se hizo cargo de la titularidad de los fondos de las cuentas de Jersey. La fundación fue constituida por los abogados extranjeros, pero el beneficiario de los fondos es el banco.

Concluidas las preguntas sobre la parte del sumario relativa a la inspección del Banco de España sobre la operación de autocartera, el fiscal preguntó al testigo si conocía a Nelson Rodríguez, el testigo protegido que ha denunciado supuestas irregularidades del banco en Latinoamérica para hacerse con el control de tres entidades bancarias por medio de la subvención de campañas electorales al presidente de Venezuela, Hugo Chávez, y pagos al ex presidente peruano Alberto Fujimori y su lugarteniente Vladimiro Montesinos. Segimón contestó que sí lo conocía, pero el juez Garzón impidió nuevas preguntas alegando que el testigo había sido convocado únicamente para que explicase lo que supiera de las operaciones de autocartera del banco, pero no de otras piezas separadas, como son las operaciones en Latinoamérica. El fiscal David Martínez Madero se sorprendió, pero acató la decisión. Los otros letrados presentes mostraron también su sorpresa, pues no es usual que se impida a un testigo declarar sobre otros aspectos del sumario sobre los que tenga conocimiento.

Ángel Galíndez, declaró durante 10 minutos y precisó que sólo recordaba que fue presidente del Banco de Vizcaya con anterioridad a Pedro Toledo y que luego se retiró, aunque pasó a la comisión delegada del banco. También declaró José Luis Nagore, que es el gestor de mercados del BBV que participó en la ejecución de la adquisición de acciones de Argentaria a través de Bankers Trust.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_