_
_
_
_
_
Crítica:
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Las razones del pistolero

Así parece haber sido en Centroamérica durante décadas de guerrilla y dominio militar, primero el hombre lleva el arma en el hombro, y más tarde uno se encuentra con el arma en el hombre, como si una y otro se hubiesen fundido como el bronce con el que Boccioni moldea un guerrero acorazado para la cubierta de esta última novela del salvadoreño Horacio Castellanos (1957). El juego de palabras del título encierra una desazonadora realidad latinoamericana, la del militar y el guerrillero que, firmada la paz con tinta de sangre, siguen enjaulados en su oficio de tinieblas, incapaces de ninguna reinserción a la vida civil, que se adivina siempre efímera. Un gigantesco sargento al que sus compañeros apodan Robocop, militar desmovilizado de una república centroamericana que alcanza la democracia, se justifica y se exculpa a lo largo de la novela exponiéndonos las razones del pistolero, de quien no conoce más que la violencia, de quien no puede convertirse en un supuesto ciudadano de a pie sin apropiarse las armas que empleó durante sus años de uniforme. Resulta sin duda un acierto del autor el dejar que su héroe nos cuente su propia historia, y la crónica personal del sargento constituye uno de los alicientes del relato, que se beneficia así de la inmediatez, de la fuerza emocional de la primera persona, la que mejor revela las jactancias, las congojas y la precaria lucidez ('me habían utilizado, se habían aprovechado de mi falta de preparación intelectual para usarme a lo bestia') de un individuo que sólo es capaz de reciclarse en lo que siempre ha sido, un violento, un secuestrador, un extorsionador, abandonando el ejército por fuerza para integrarse en organizaciones paramilitares y bandas de delincuentes que sólo pretenden socavar la libertad para sacar provecho del regreso al enfrentamiento. El sargento es un hombre de acción y no tiene tiempo que perder, de modo que habla a trompicones, con fraseos breves y un registro en el que se refleja su condición de tipo duro. No emplea eufemismos, va al grano, desprecia los adjetivos porque sabe que en ellos se esconden las emociones que ni tiene ni desea tener, sobrevive a balazos y su historia parece alejarse sin remedio de la ficción para introducirse en una cruda realidad. El arma en el hombre nos devuelve el motivo clásico del miles gloriosus vuelto del revés, adaptado a unos tiempos que no se permiten ya las alegrías de la sátira.

EL ARMA EN EL HOMBRE

Horacio Castellanos Moya Tusquets. Barcelona, 2001 132 páginas. 10 euros

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_