Adjudicada la rehabilitación del campanario de Albaida el día que se derrumbó

El mismo día en que el viento derrumbó la balaustrada norte del campanario de la Asunción de Albaida, la Consejería de Obras Públicas adjudicó las obras de restauración. Fuentes de la consejería han asegurado que casualmente el mismo miércoles se había convocado la mesa de contratación para conceder la obra a una de las cuatro empresas que se habían presentado; el derrumbe se provocó en la madrugada del miércoles.

Ayer mismo, la empresa adjudicataria retiró restos que podían caer de este campanario del siglo XVII. La reivindicación de esta restauración ha durado más de siete años y ha sido impulsada, entre otros, por la plataforma Prorestauración que se creó en 1995, la Colla de Campaners d'Albaida, y el Ayuntamiento, que tuvo que instalar vallas de protección en los alrededores de la torre por donde diariamente circulan más de 100 personas.

En 1998 los campaneros decidieron dejar de tocar las seis campanas. 'Notábamos cómo iba cediendo la estructura y nos caían trozos del techo', recuerda Martí Jordá, de la Colla de Campaners. Desde entonces, las campanas están instaladas en medio de la plaza Mayor de Albaida, donde continúan haciéndolas sonar como acto de reivindicación. 'Estamos contentos porque parece que la obra va a hacerse, pero nos produce tristeza ver cómo desde la Generalitat esperan a que se arriesgue la integridad física de los vecinos para que se actúe sobre el patrimonio', añadió ayer sobre el derrumbe y la adjudicación de la rehabilitación Antoni Berenguer, presidente de la Colla.