El ministro de Sanidad francés admite que practicó la eutanasia
El ministro francés de Sanidad, Bernard Kouchner, ha practicado la eutanasia. En una entrevista que publica hoy el semanario holandés Vrij Nederland, el responsable de la sanidad gala afirma 'haber empleado la eutanasia' con enfermos que 'sufrían demasiado' y 'que iban a morir'. 'Les ayudé', señala. Kouchner sitúa la experiencia dentro de su acción como fundador de la ONG Médicos sin Fronteras: 'Eso ocurrió en el Líbano y en Vietnam'.
La eutanasia, legalizada desde el pasado abril en Holanda, pero aún no en vigor, continúa prohibida en Francia. No obstante, desde la primavera de 2000 se admite la derogación de la prohibición para los casos 'raros' y 'excepcionales'.
Kouchner, que en otras ocasiones se ha mostrado favorable a gestos médicos destinados a acortar la agonía de los enfermos, nunca ha querido hablar de la conveniencia de legislar sobre la cuestión. 'Es un tema delicado. Por esencia, la eutanasia es contraria a la ética médica. Los médicos estamos para proteger la vida, no para acabar con ella', dice al semanario. El ministro cree que 'es la sociedad la que debe decidir si quiere abordar el problema'. 'Se trata de un debate difícil', añade. Kouchner tiene en cuenta el terrible precedente nazi, donde la autorización de la eutanasia fue la primera puerta abierta a la legalización de la eugenesia y a los exterminios en masa con argumentos raciales.
Para Bernard Kouchner, la prioridad francesa hoy 'es mejorar las leyes que protegen al paciente'. Cree que no conviene 'abordar otras regulaciones' antes de haber resuelto lo que considera urgente. Refiriéndose a su experiencia de médico que optó por practicar la eutanasia, Kouchner precisa que lo hizo sirviéndose 'de inyecciones que contenían una gran cantidad de morfina'. 'Nunca recurrí a las pastillas', puntualiza.
Los sondeos efectuados en Francia demuestran que la opinión pública es mayoritariamente favorable a la eutanasia, pero Kouchner ya opinó en su momento que esa cuestión no debe regularse 'sólo teniendo en cuenta si hay una mayoría de opiniones favorables'. Para el ministro de Sanidad, la cuestión trasciende las fronteras del debate político y 'sólo puede ser discutida al margen de cualquier aproximación partidista'.
