CiU y PP rechazan en el Parlament la misma moción que apoyaron en Tortosa a favor de los antitrasvase

Convergència i Unió (CiU) y el Partido Popular certificaron ayer de nuevo su alianza política en Cataluña cuando ambos grupos sumaron sus votos en el Parlament para rechazar una propuesta de la izquierda a favor de los movimientos ciudadanos surgidos en las comarcas del Ebro en contra del Plan Hidrológico Nacional (PHN).

Con esta moción, Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V) pretendía poner en evidencia las contradicciones en que CiU y PP han incurrido respecto al trasvase del Ebro, ya que una propuesta en los mismos términos obtuvo el respaldo unánime de convergentes y populares en el Ayuntamiento de Tortosa a principios de junio.

La iniciativa reclamaba el apoyo 'moral y material' del Parlament a la campaña europea iniciada por las plataformas en Defensa del Ebro, es decir, la interposición de un recurso ante la Unión Europea y una manifestación en Bruselas. Además, se pedía la adopción de medidas judiciales para impedir cualquier trasvase de agua del Ebro.

En principio, la moción debía convertirse en un simple trámite parlamentario. Y lo fue respecto a las votaciones -68 en contra y 67 a favor-, pero durante el debate se enconaron los ánimos hasta el punto de que Josep Curto del PP tuvo un enfrentamiento verbal con Joan Boada, de IC-V, a quien insultó e insinuó con gestos que saliera fuera del hemiciclo a discutir la cuestión, sin que el presidente del Parlament, Joan Rigol, intercediera en la disputa. Al final, otro miembro del PP sacó a Curto del hemiciclo para que la discusión no fuera a mayores.

Con anterioridad, Dolors Comas, de IC-V, que había defendido la moción, había llamado hipócrita al PP por haber apoyado la moción en el Ayuntamiento de Tortosa y en aquel momento rechazarla en el Parlament. El popular Rafael Luna le dedicó el mismo calificativo, a lo que Boada le contestó que los parlamentarios del PP eran unos 'falsos'.

Populares y convergentes rechazaron la propuesta al considerarla extemporánea e inoportuna. En cambio, los tres partidos de la izquierda -PSC, ERC e IC-V- reiteraron su oposición al actual PHN y a favor de cualquier medida de oposición.

El parlamentario socialista Antoni Sabaté denunció que su partido se quedará sin ningún representante en el consejo rector del Instituto para el Desarrollo de las Comarcas del Ebro (IDCE)tras el acuerdo alcanzado entre el PP y CiU para gobernar en coalición el Consejo Comarcal del Baix Ebre.

Este organismo comarcal se reunirá hoy y nombrará un representante popular y otro nacionalista para el consejo rector, contraviniendo así la ley de creación del IDCE, que establecía que todos los partidos con algún escaño parlamentario deben tener como mínimo un representante.

El consejero de Política Territorial, Pere Macias, admitió ayer a este periódico que deberá nombrar un miembro socialista, dentro del cupo que tiene reservado para la designación directa.