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Los ex socios de Larrañaga desmienten que le amenazasen en alguna ocasión

Tres 'ertzainas' destacan las contradicciones en la declaración del acusado

Tres de los agentes de la Ertzaintza que participaron directamente en la investigación del crimen, cometido en mayo de 1999, pusieron de relieve las contradicciones entre lo testificado por el acusado el lunes y lo que Larrañaga declaró a la policía vasca tras su detención en Madrid.

Larrañaga confesó el lunes al jurado que mató a la letrada tras pedirle dinero y 'perder el control' cuando ésta se lo negó. Sin embargo, los tres agentes que declararon ayer recalcaron que el acusado 'no dijo en ningún momento que hubiera matado a la letrada después de pedirle dinero' y de que se enzarzaran en una discusión.

Los ertzainas recordaron que en su primer interrogatorio, después de que encontraran el nombre de Larrañaga en la agenda de la letrada asesinada, el acusado ofreció 'todo lujo de detalles' de su periplo por Vitoria el día del crimen, pero sin hacer alusión al homicidio.

En una segunda declaración, tras un registro de la vivienda que ocupaba en Madrid, donde fueron halladas distintas pruebas que le incriminaban, Larrañaga asumió la autoría del crimen, la justificó por la necesidad de dinero, pero no aludió a ninguna discusión previa. Sobre las circunstancias del homicidio, contó que cuando Rubio procedía a entrar en su despacho, él la agarró por detrás, ella comenzó a gritar y entonces él sacó un cuchillo de su chaqueta y le cortó el cuello. No mencionó, en cambio, la 'nebulosa' mental que el lunes le había impedido refrescar la secuencia de hechos.

El padre de Begoña Rubio testificó que fue él mismo quien halló el cadáver de la joven y subrayó que tanto él como su esposa y su otra hija se encuentran en tratamiento psicológico desde entonces. Dorleta Léniz, ex esposa de Larrañaga, destacó que éste nunca les daba dinero ni a ella ni al hijo de ambos tras la separación, pero que no era agresivo ni violento. 'Yo creía que era incapaz de matar a una persona, pero aquí estamos', señaló.

Tras concluir la fase testifical, más breve de lo previsto (inicialmente estaban citados 42 testigos), hoy declararán los peritos antes de que las partes presenten sus conclusiones. El jurado podría tener su veredicto mañana.

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Larrañaga, sentado en el banquillo en la jornada inicial del juicio.
Larrañaga, sentado en el banquillo en la jornada inicial del juicio.PRADIP J. PHANSE

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