El veto de Rato obliga a que Cajastur asuma la presidencia de Cantábrico

La junta general aprobó también excluir de la Bolsa a Cantábrico, que mantiene un 3,5% de su capital en el mercado. La propuesta de nombramiento de Menéndez como presidente de Cantábrico, en sustitución de Óscar Fanjul, partió de forma conjunta de los dos socios más importantes de la eléctrica asturiana y que tienen cautelarmente suspendido el ejercicio de sus derechos políticos por la presencia directa o indirecta de capital público en su accionariado: Ferroatlántica-EnBW y Electricidade de Portugal (EDP), titular del 19,26% de forma concertada con Caja de Asturias, que controla a su vez otro 15%.

Menéndez aseguró que todos los accionistas han alcanzado un acuerdo 'pleno y absoluto' sobre la estrategia empresarial y el plan industrial de la sociedad, aunque aún no sobre el reparto del poder futuro y otros aspectos societarios.

La situación que ahora comienza, aseguró, es 'transitoria, pero no carente de capacidad decisoria', por lo que 'no afectará', dijo, 'a la marcha de la compañía'. En este sentido, confirmó que la compañía eléctrica asturiana mantendrá su vocación de crecimiento y de expansión, y que pujará por los activos que Endesa ponga a la venta.

Sin buscarlo

El presidente de la Caja aseguró que la entidad financiera ha asumido transitoriamente la presidencia de la eléctrica sin 'desearlo ni buscarlo' y que en todo caso 'no se tomará ninguna decisión en contra del criterio de los principales propietarios de la eléctrica' durante el periodo transitorio y hasta tanto el Consejo de Ministros resuelva finalmente sobre el expediente abierto a los dos más importantes accionistas de la eléctrica.

Menéndez expresó la plena confianza de Cantábrico y de sus accionistas en que el expediente administrativo abierto por el Gobierno a Ferroatlántica-EnBW y EDP por la presencia directa o indirecta de capital público en su accionariado se resuelva 'de forma satisfactoria para todos los afectados'.

Mientras dure este periodo, la Caja, aseguró, actuará con 'lealtad' hacia los demás accionistas, según el acuerdo alcanzado. El nuevo presidente de Cantábrico admitió que los tres accionistas de referencia -Ferroatlántica-EnBW; EDP y la propia Caja- continuarán con sus actuales conversaciones para tratar de llegar a un acuerdo global, dado que hasta ahora sólo se ha alcanzado el consenso en el plan industrial y empresarial.

En el mismo sentido, Ferroatlántica y EDP expresaron también en un comunicado conjunto que se 'continúan desarrollando' conversaciones 'para tratar de alcanzar un acuerdo de estabilidad accionarial a largo plazo en la compañía' y advirtieron que la propuesta para que Menéndez asumiese la presidencia de Cantábrico 'tiene carácter puntual, sin perjuicio del resultado final de estas conversaciones'. Como consecuencia de la decisión administrativa que suspende los derechos políticos y la capacidad de gestión de los dos más importantes socios de la eléctrica, Ferroatlántica y EDP no estuvieron presentes en la junta general de accionistas.

La composición del consejo de administración que emanó de la junta general de ayer está integrado sólo por nueve miembros, el mínimo que prevén los estatutos de la compañía, de los que cinco representan a la Caja -que hasta ahora sólo tenía cuatro represen-tantes- y los otros cuatro son independientes.