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Detenidos 19 miembros de una mafia ucrania de inmigración ilegal

Eran captados a través de agencias de viajes, les traían a España en autobús y les hacían trabajar en el campo de sol a sol hasta abonar el viaje. Pero ahí no acababa todo. Después, tenían que pagar mensualmente un canon por su seguridad, ya que, de no hacerlo, peligraba la vida de sus familiares en Ucrania.

Ésta es la vida que llevaban en España un centenar de inmigrantes ilegales ucranios que abandonaron su país en busca de trabajo y que han sido localizados por la policía en Madrid y Jaén en el transcurso de una operación contra las mafias ucranias. En total han sido detenidas 19 personas, entre ellas el presunto capo de la red, Sergy B., Bámbula; pero su lugarteniente, Alexandre Z., Sacha, y el tesorero, Ahmet Y, Turco, han logrado darse a la fuga.

Según las averiguaciones realizadas por los agentes de la OCAPE, especializados en delitos relacionados con ciudadanos de los países del Este, la red tenía su centro de operaciones en Madrid y mantenía conexiones con las mafias de la ciudad de Lvov (Ucrania). Allí captaban a los inmigrantes a través de anuncios engañosos en agencias de viajes que ofrecían trabajo en España.

Las víctimas, gente humilde y con necesidades económicas, eran trasladadas a Madrid en autobús. Una vez aquí, les retiraban el dinero y sus documentos y eran alojados en pisos de Móstoles, Leganés y Alcorcón. Allí se hacinaban bajo el control de las mujeres de la organización, a las que llamaban 'suegras', hasta que eran distribuidos para trabajar por España.

Sus destinos eran campos de cultivo de Arquilla y Linares (Jaén), donde la red contaba con la connivencia de los dueños, uno de los cuales, Juan A. H., también ha sido detenido. Los inmigrantes trabajaban esclavizados de sol a sol durante dos o tres meses hasta pagar el viaje. Una vez saldada la deuda quedaban libres para trabajar por su cuenta, pero bajo el control de la red, que les exigía entre 20.000 y 30.000 pesetas al mes para garantizarles su seguridad y la de sus familiares en Ucrania, a los que usaban de rehenes.

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