Baile flamenco para Lorca
Silencio sepulcral. En el centro del escenario reposa un ataúd con cuerdas atadas al techo. Y alrededor, seis mujeres, vestidas de gris hasta los tobillos, se retuercen de dolor. Unos segundos después comienza a escucharse la música de réquiem. Así empieza la adaptación de la obra escrita en 1936 por Federico García Lorca La casa de Bernarda Alba, un drama de gran tensión en el que una mujer queda viuda y a cargo de sus cinco hijas en una sociedad andaluza muy cerrada.Realizado por la Compañía de Teatro Flamenco y producido por La Tati Productions, SL, y el Ayuntamiento de Las Rozas, es un montaje en el que se entremezclan el drama de la obra de Lorca y el baile flamenco.
Una hora y 20 minutos dura esta obra, en la que la madre y sus cinco hijas -pues hay una ausencia de algunos otros personajes de la obra original, como La Poncia y la Criada- se expresan con el baile, con el zapateo fuerte, con la mirada hostil y casi nunca con palabras.
"Es una adaptación realmente innovadora, aunque hubiera preferido ver bailar más a La Tati", comentó la agregada cultural de los Países Bajos, Karin Wester, que se encontraba entre el público.
Es la primera vez en su carrera que La Tati, una destacada bailaora, se enfrenta a personificar a una mujer como Bernarda. Mujer con la que finalmente comparte algunas similitudes, pues La Tati también nació en la posguerra, conoció la represión de esa época, quedó viuda y tuvo que criar sola a sus dos hijos.
"Ha sido una experiencia bastante satisfactoria. Para mí, el escenario es como una caja de música, y me he metido tanto en este papel que realmente me siento como si estuviera en casa con mis cinco hijas. Cuando muere una de ellas en el escenario, no lo puedo resistir, es muy duro; afortunadamente, no tengo dos funciones al día", explicó La Tati, después de ser ovacionada durante varios minutos por el público del preestreno, en el Centro Cultural de Las Rozas.
El director, Javier Garcimartín, se mostró satisfecho con el resultado. "Todo ha sido muy complejo; la música es nueva, igual que todas las coreografías. Esta obra la hemos preparado durante casi un año, pero el trabajo ha sido muy agradable, porque lo hemos hecho con un excelente equipo humano. Ahora, lo importante es llegar al público para poder contarle nuestra visión del drama de Bernarda". Un drama que el director considera de actualidad y en el que no quiso representar a esta mujer como un personaje malvado como habitualmente se hace. "Bernarda podría ser cualquiera de nosotros, y de hecho termina siendo víctima de las circunstancias", agregó el director.
La mujer que representa a Adela, la hija rebelde de Bernarda, dice que lo que más le costó fue la interpretación teatral, porque, al fin y al cabo, es bailaora de flamenco, y no actriz.
La compañía representará siete funciones más, en Torrelodones (3 de noviembre), Alcorcón (4), Móstoles (11), Pinto (17), Torrejón (19), Alcalá (24) y San Sebastián (25 de noviembre), y luego tiene previstas una gira nacional y otra internacional.
