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Plaza & Janés exigió a Planeta que retirara del mercado 'Sabor a hiel' La Federación de Editores hace una llamada al respeto de la propiedad intelectual

Los abogados de Plaza & Janés, editorial que publicó en España Álbum de familia, de Danielle Steel, presentaron un requerimiento a Planeta, editora de Sabor a hiel, de Ana Rosa Quintana, exigiéndole retirar el libro del mercado en cuanto supieron que una parte había sido plagiada de Steel. Plaza pidió a Planeta que le informara del número de ejemplares editados y vendidos (más de 100.000), y exigió las cuentas de la liquidación pendiente.

Los abogados de Plaza & Janés informaron a Planeta que el caso podría constituir un delito penal, aunque la editorial opina que lo sucedido con Quintana "puede pasarle a cualquiera, ya que el editor confía en la buena fe de los autores". Plaza & Janés, que pertenece al grupo Bertelsmann y participa con Planeta en la Colección De Bolsillo, está a la espera de la respuesta al requerimiento legal; ignora si habrá acuerdo o tendrán que llegar a una demanda, que probablemente interpondrían los agentes de Steel. De momento, Plaza considera un primer paso positivo que Planeta haya retirado los ejemplares del mercado.Danielle Steel ya ha sido informada del plagio, y se lo ha tomado con calma, según fuentes editoriales. Otra cosa sería que el caso se hubiera producido en Estados Unidos. Sus agentes, la firma neoyorquina Janklow & Nesbit, declinaron ayer hacer comentarios, y remitieron a Plaza & Janés.

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Nuria Cabutí, directora de comunicación de Plaza & Janés, comentó que Plaza se interesó por el libro de Quintana cuando supo que la presentadora de televisión tenía un proyecto en marcha. La editora Carmen Fernández de Blas se puso en contacto con ella. La novela no estaba aún escrita, y ofrecieron cuatro millones de pesetas, pero Planeta mejoró la oferta. Creen los de Plaza que Planeta ofreció a Quintana más del doble que ellos, y afirman que se retiraron de la puja porque no habían leído el libro y no estaban seguros de su calidad.

La Federación de Gremios de Editores de España, por su parte, no quiso ayer tomar partido en la polémica, siguiendo fiel a su tradición de neutralidad total en casos que afectan a las diversas empresas de la Federación. Antonio María de Ávila, director ejecutivo de la federación, hizo una declaración genérica en la que pidió "un respeto escrupuloso a los derechos de propiedad intelectual", y reprobó "todo tipo de prácticas contrarias a esa normativa".

Ávila lamenta el perjuicio que la situación pueda ejercer sobre la imagen del mundo editorial español, "que, en su inmensa mayoría, suele cumplir con la ley de manera escrupulosa".

El caso del, por ahora, doble plagio de Quintana (a la norteamericana Steel y a la escritora mexicana Ángeles Mastretta) ha trascendido ya las fronteras españolas. El diario Frankfurter Allgemeine publicó ayer una nota, con bastante ironía y humor, dando cuenta del escándalo sucedido en España.

Si el plagio de la presentadora de televisión ha sido la comidilla del mundillo editorial y literario español en los últimos días, ahora empieza a serlo en Francfort, adonde van llegando los editores españoles.

Uno de los comentarios más extendidos ayer era que la novela retirada se ha convertido en uno de los libros más buscados por los escritores: quieren saber si algunos de sus textos han ido a parar también al peligroso ordenador de Ana Rosa Quintana.

Dimisión de Navajo

Ayer, con el escándalo en plena ebullición, el Grupo Planeta generó una nueva noticia que promete avivar el fuego de esta controversia. Su directora general de Ediciones, Ymelda Navajo, anunció ayer que dejaba esta empresa para irse a montar una nueva editorial con el diario El Mundo. Según fuentes de Planeta, el tormentoso caso de Quintana podría estar detrás de la decisión de Navajo, que negó ayer este extremo aduciendo que su relación con Planeta durante muchos años ha sido "excelente, como la de un matrimonio". Ymelda Navajo, de 48 años, ha llegado a dirigir en Planeta una división de librerías que manejaba 17.000 millones de pesetas. De formación periodista, Navajo trabajó también en las editoriales Alianza y Alfaguara y fue la creadora del sello Temas de Hoy.

El Grupo editorial Planeta, cuyo consejero delegado es José Manuel Lara Bosch, inició una gran reestructuración en 1995, tras el fallecimiento de Fernando Lara Bosch, hijo del patriarca de la editorial José Manuel Lara Hernández y hermano del actual consejero delegado. Culminó esa reestructuración, tras varios cambios, el pasado mes de junio cuando se produjeron algunos nombramientos, como el de Julián León, Miquel Alzueta y José Manuel Calvín.

Al mismo tiempo que se anunciaban estos nombramientos, desde la editorial se afirmaba que Ymelda Navajo continuaría como directora general de ediciones del grupo y que se haría cargo de nuevos proyectos. En una entrevista a este diario Lara Bosch declaraba el año pasado que el problema básico de Planeta era "generar editores".

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