Universidad y empresa crean un 'lobby' para impulsar en Barcelona la 'nueva economía'

Barcelona - 16 oct 2000 - 00:00CEST

La flor y nata de las empresas de la nueva economía, académicos y representantes de las instituciones han creado una plataforma para situar Barcelona en los sectores punteros de la economía. La iniciativa, bautizada como Barcelona Breakfasts, quiere acabar con la supuesta depresión de la ciudad, reenfocar las eternas comparaciones con Madrid y explorar cómo aprovechar mejor las bazas económicas de Barcelona y su entorno para dar un salto cualitativo hacia un horizonte económico marcado por las nuevas tecnologías.

"Barcelona, económicamente, está a reventar. El debate no se reduce a las sedes de empresas. Las bases competitivas de la economía española están aquí. ¿Qué diremos cuando estemos en crisis?"Al calor de estas reflexiones de Joan Trullén, profesor de Economía Urbana de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), y de Xavier Marcet, director del consorcio de ayuntamientos Localret, acaba de echar a andar entre las paredes del rectorado de la Universidad Politécnica de Cataluña (UPC) una plataforma que quiere rescatar Barcelona de la "autoflagelación" en el terreno económico.

La base de partida es un diagnóstico y, así, sobre la primera sesión de Barcelona Breakfast, celebrada el pasado día 11 con el alcalde de la ciudad, Joan Clos, como ponente invitado, podría haber flotado el interrogante que dio título a la popular comedia de Peter Bogdanovich ¿Qué me pasa, doctor? Alrededor de una mesa con pastas, zumo de naranja y café ofrecidos por el rector de la UPC, Jaume Pagès, un revoltillo de profesores universitarios, empresarios, directivos, consultores y representantes de instituciones auscultaron a una paciente llamada Barcelona.

¿Está enferma la ciudad? En opinión de Trullén y Marcet, la paciente está perfectamente sana. "Basta fijarse en el comercio exterior, el mercado laboral, donde faltan desde ingenieros hasta conductores de autobuses, o la concentración empresarial", subrayan.

Pero la veintena de participantes en este foro de élite -dominado por voces autorizadas en la nueva economía como las de directivos de Telefónica, Alcatel, Colt, Menta, Hewlett-Packard, Synera Systems, Debis y al-pi (Uni2)- se quedaron, sobre todo, con la reflexión del catedrático Francesc Soler Parellada: "Barcelona debe ya levantarse del diván". Los posibles problemas de la ciudad no son "de depresión", sino "de crecimiento".

'Mea culpa' de Telefónica

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Clos cree que la asignatura pendiente de Barcelona es ser una "ciudad global"

En el debate abierto, la cara de Telefónica en Cataluña, Ricardo Ruiz de Querol, confesó uno de los pecados de la operadora: Telefónica ha aprendido a ser global, ahora debe aprender a "ser local". La posible instalación de dos centros de I+D en Barcelona puede ayudar a la compañía a situarse más cerca del mercado.El elemento comparativo lo aportó el director de la operadora Colt, Ginés Alarcón: "Desde que nos implantamos en Barcelona hace un año, el desarrollo de las infraestructuras y los servicios ha sido extraordinario. En las telecomunicaciones, el nivel es homologable al de ciudades como París, Francfort o Roma".

El referente de Barcelona -Ottawa, como ejemplo de ciudad que ha sabido posicionarse en la nueva tecnología frente a Toronto- lo puso el hombre de la canadiense Corel en España.

El lamento común lo expresó el director de Alcatel en Cataluña, Ramón Palacio: "No encontramos ingenieros de telecomunicaciones". Todos asintieron.