Mercado acelerado
El mercado no perdona. Mischa Maiski viajó a Torroella de Montgrí con los minutos contados para ensayar: menos de 15. En lo que va de año lleva interpretados 106 conciertos, lo que da una media superior a 13 por mes. Prácticamente día sí y día no se coloca ante el público.La meteórica carrera de este solista, alumno de Mstislav Rostropóvich en Moscú y del legendario violonchelista ruso Gregor Piatigorski en California, empezó a acelerarse a partir de mediados de la década de los setenta y por el momento no lleva camino de entrar en una etapa más serena.
Artista del sello discográfico Deutsche Grammophon desde 1982, tres años más tarde grabó para esta firma las Suites para violonchelo solo, de Johann Sebastian Bach, disco que le proporcionó diversos premios y que consolidó su fama a escala internacional.
De la mano de tan acelerada trayectoria han corrido los honorarios que cobra por concierto. A finales de agosto de 1985, en el Festival de Torroella de Montgrí, cobró 120.000 pesetas por intervenir en un programa considerablemente más largo junto con el violinista Dimitri Sitkovetsi, el viola Gerard Caussé y la pianista Bella Davidovich. Ahora su tarifa se sitúa en los dos millones y medio por concierto de Haydn. El mercado no perdona, efectivamente.
