Hacienda investiga las actividades de dos inspectores fiscales de Baleares
La Agencia Tributaria ha desplazado a Baleares a dos expertos en auditoría de cuentas para que examinen la gestión profesional del inspector de Hacienda de la delegación regional Javier Salvador Milla. La esposa de éste, Josefa Falgueras, es administradora de una sociedad que también está siendo investigada. Asimismo, se investiga al subinspector Sebastián Cañellas, quien participa en una empresa vitivinícola junto a Falgueras y diversos empresarios mallorquines.
Desde hace más de un mes, los enviados de los servicios centrales de la Agencia Tributaria repasan actuaciones en las que han intervenido sus compañeros, según confirmaron diversas fuentes conocedoras de la investigación en marcha.En paralelo, se indagan las actividades de la empresa Vigilancia Insular y Protección, SA, (VIPSA), controlada por Josefa Falgueras, esposa de Javier Salvador. La empresa concentra su actuación en la custodia de hoteles. Las fuentes consultadas dijeron que las indagaciones sobre la actividad del inspector y el subinspector fiscal se iniciaron hace meses. La investigación aún no está concluida y los afectados niegan tener conocimiento de ella.
VIPSA empezó trabajando para el sector hotelero, el más importante de la economía balear. Las citadas fuentes no precisaron si el inspector Salvador Milla se ocupó específicamente del control fiscal de este sector. Posteriormente, VIPSA diversificó su actividad a otros ámbitos. Falgueras tiene intereses en numerosas sociedades y reconoció que ha centrado la mayor parte del crecimiento del grupo en el sector hotelero.
Javier Salvador trabaja desde hace 22 años en la Agencia Tributaria. Primero prestó sus servicios en Madrid y desde hace más de una década está radicado en Baleares.
La empresa VIPSA, referenciada comercialmente como Seguridad VIP, está especializada en centrales de alarma, vigilancia y protección de bienes, y presta servicios al sector del turismo, que domina el 80% de la actividad económica de las Baleares.
Tanto Savador como Falgueras negaron que sean objeto de una investigación fiscal. "Me está dejando anonadado. No tengo en absoluto ninguna noticia ni conocimiento directo de este asunto", manifestó ayer a este diario Javier Salvador, quien aseguró que mantiene su actividad como inspector con normalidad. Salvador añadió que hoy reclamaría información en la Agencia Tributaria.
"Mi marido es muy honrado y honesto. Nadie puede decir lo contrario y el que sea capaz, que hable", manifestó la esposa del inspector. Falgueras, abogada y empresaria, fue anteriormente delegada regional de un banco.
El matrimonio deslindó la gestión de Javier Salvador como funcionario y la privada de la esposa. Ésta reivindicó la independencia de su actividad privada, que "es pública y notoria" y advirtió de que está casada "en régimen de separación de bienes". Falgueras afirmó que fue sometida a una inspección fiscal el año pasado, "lo que demuestra que la esposa de un inspector tributario no tiene privilegios ni ninguna prebenda".
Esta inspección se zanjó pagando 400.000 pesetas por un acta fiscal, por un error en el IRPF de unos trabajadores que pasaron de eventuales a fijos. "¿Qué empresario no ha sido investigado?", inquirió Josefa Folgueras, que participa en una amplia red de sociedades, entre ellas, la vitivinícola Macià Batle, impulsada por la familia del subinspector Sebastián Cañellas Batle, también investigado.
