500 vecinos se manifiestan de nuevo en Barajas contra el ruido de los aviones

Una decena de niños encabezaron ayer una nueva manifestación de 500 vecinos de los alrededores de Barajas para protestar por el ruido que producen los aviones. A la movilización, convocada por la Federación Regional de Asociaciones de Vecinos (FRAVM), se sumaron varios alcaldes de pueblos aledaños a Barajas, la edil madrileña de IU Marisa Castro, miembros de la Asociación Española contra el Ruido de los Aviones (AECRA), el colectivo Pijamas en Acción de la Alameda de Osuna y habitantes de Mejorada del Campo, San Sebastián, Algete, Valdetorres, Fuente el Saz y Belvis de Jarama.Los manifestantes, vigilados por un fuerte dispositivo policial, recorrieron la T-2 y la T-1 hasta llegar al dique Sur por el interior del aeropuerto, ante la mirada atónita de los pasajeros.

Los vecinos -muchos en pijama, con bata y mascarillas y con pancartas y silbatos- gritaron contra los planes de ampliación del aeropuerto, la falta de medidores para registrar el queroseno no quemado que atufa a los residentes de la zona y el incumplimiento del Plan de Aislamiento Acústico.

Cerca de medio centenar de vecinos de Belvis de Jarama, vestidos de luto, clamaron, además, por la previsible muerte de su pueblo cuando se construyan la cuarta y quinta pistas. "Por la noche soportamos el sobrevuelo de unos aviones que hacen vibrar las estructuras, y a pesar de que han anunciado que los iban a prohibir, seguimos igual", comentó Gabriel Reina.