BT puja por el 30% del BSCH en Airtel para evitar que Vodafone tome el control

La pugna por el control de Airtel se hace más encarnizada cada día. La operadora británica de telecomunicaciones BT presentó ayer al Banco Santander Central Hispano (BSCH) una oferta en firme por el 30,45% de Airtel que está en manos de la entidad financiera. BT quiere impedir así que Vodafone Airtouch, que ya tiene el 21,7% de la compañía española, se haga con el control absoluto del capital de Airtel.Fuentes próximas a BT, que tiene ahora el 17,81% de Airtel, aseguran que la compañía británica negocia en nombre del núcleo estable de la operadora española, formado por la propia BT, Vodafone Airtouch, la constructora Acciona, Corporación Financiera Alba y la sociedad de inversiones de Juan Abelló, con el 56% de las acciones. Fuentes conocedoras de la oferta de BT aseguran que ésta es superior a la presentada por Vodafone Airtouch, que ha valorado el 30,45% de Airtel en 1,2 billones de pesetas y está dispuesta a ceder al banco un 5,5% de su capital a cambio de los títulos en la operadora española.

Otras fuentes señalan, sin embargo, que BT valora Airtel algo por debajo que Vodafone, porque cree que el mercado de móviles en España no va a seguir creciendo al ritmo actual y porque, al negociar en nombre de los socios que ahora tienen la mayoría del capital, no está dispuesta a pagar la prima de control que quiere el BSCH. Esas fuentes señalan, no obstante, que la compañía británica ha abierto tan sólo un proceso negociador y que los términos de su oferta se irán concretando conforme se conozca la respuesta del banco.

Acuerdos de la mayoría

Los acuerdos del núcleo estable, firmados en abril de 1998, establecen que si uno de sus miembros adquiere a un tercero participaciones de Airtel, está obligado a repartirlas entre sus aliados, proporcionalmente al porcentaje actual de acciones que tiene cada uno. Varios miembros del núcleo estable han confirmado que si esos acuerdos se rompen, tienen previstas fuertes penalizaciones, que se incrementan proporcionalmente al precio pagado por la adquisición de nuevas acciones.

Las fuentes citadas recuerdan, como prueba del deseo de BT por preservar la alianza, que la compañía británica ya negoció la compra del 16,28% que tenían Endesa y Unión Fenosa en la operadora en nombre del resto de los aliados. Los acuerdos secretos que tenía el BSCH con las eléctricas, sus socios estratégicos en otros sectores y accionistas de referencia en los dos competidores más directos de Airtel (Retevisión y Amena), permitieron al banco elevar del 14,17% al 30,45% su participación en la operadora. El banco es desde entonces el primer accionista de Airtel, aunque no tiene representación en la comisión ejecutiva de la compañía ni ha podido elevar el número de consejeros en el consejo de administración por la resistencia del resto de los socios. Esa pugna por la representación en los órganos de decisión, junto al hecho de que el banco esté compitiendo con Endesa y Fenosa, han provocado gran incomodidad en el BSCH y de ahí su interés por vender.

De acuerdo con esas fuentes, BT se ha dirigido al banco después de hacer ver a Vodafone, que en enero pasado adquirió Airtouch, la accionista originaria en Airtel, que los acuerdos del núcleo estable son muy rígidos y pueden perjudicar seriamente la rentabilidad de una operación como la que está negociando en solitario con el BSCH.

Vodafone Airtouch, que está en plena consolidación de sus acuerdos con Bell Atlantic y en medio de la mayor oferta pública de adquisición de la historia sobre la alemana Mannesmann, y BT comparten intereses en Francia, Corea y Japón y ésa sería una de las bazas que utilizaría BT para hacer ver a su competidora la conveniencia de no desestabilizar Airtel, porque podría desencadenar la ruptura de otros acuerdos.

Airtel, que empezó a dar servicio a finales de 1995, cerrará el año muy cerca de los cinco millones de clientes, con una facturación cercana a 320.000 millones de pesetas y unos 25.000 millones de beneficio, lo que la convierten en una de las operadoras de móviles que más rápidamente ha crecido en Europa.

Otras candidaturas

El banco ha abierto negociaciones con Vodafone Airtouch y con otras operadoras europeas y estadounidenses, lo que ha hecho temer al núcleo estable de Airtel que pudiera dar entrada incluso a un socio no deseado por la mayoría en el capital de la operadora. Conviene recordar a ese respecto que el BSCH pugnó junto a France Télécom para entrar en Retevisión y que ahora la operadora francesa busca cualquier vía de entrada al sector de móviles en España. El BSCH también negoció con Deutsche Telekom, pero la operadora germana ha firmado ya un acuerdo con Jazztel para optar a la cuarta licencia de móviles en España, lo que ha enfriado las conversaciones.

British Telecom ha tenido siempre unas buenas relaciones con el Banco Santander, lo que ahora podría jugar a su favor en las negociaciones con el nuevo BSCH frente a las que mantiene Vodafone Airtouch. De hecho, la compañía británica lanzó sus operaciones en España en el año 1994 de la mano de Emilio Botín, al crear junto al Santander una empresa conjunta (50% para cada parte) que utilizó como base la red de comunicaciones del banco. La alianza duró tres años, hasta que BT adquirió al Santander su 50% en BTTelecomunicaciones. También en 1997, el Santander vendió a BT un 8,5% de sus acciones en Airtel, aunque cedió otro 5% a Airtouch para mantener el equilibrio de poder en la operadora de móviles.