Arenas alega que los 'sobresueldos' de Telefónica son sólo asunto de la empresa

La precampaña electoral sigue subiendo de tono. El secretario general del PP, Javier Arenas, criticó ayer con dureza al líder del PSOE, Joaquín Almunia, quien el día anterior había llamado "mentiroso" al ministro de Economía, Rodrigo Rato, por el escándalo de las opciones sobre acciones de los directivos de Telefónica. Arenas le tachó de "candidato del insulto" y despachó la polémica concluyendo que los sobresueldos que han recibido los directivos son un asunto de esta "empresa privada" que deben resolver sus accionistas.

Arenas se mostró muy sorprendido porque Almunia esté "suplantando" a los accionistas de Telefónica. No sólo eso. Según el secretario general del PP, el candidato socialista está "perjudicando" a estos accionistas con sus críticas sobre los beneficios que obtienen los directivos de la compañía.Con este espinoso asunto, según Arenas, Almunia está "perdiendo los papeles", puesto que de alguna manera ha llegado a proponer "expropiar unos beneficios empresariales" para utilizarlos como gasto público, algo que Arenas ha calificado de disparate.

En cambio, la sucesión de escándalos que en los últimos días se han destapado en el entorno del Gobierno del PP ha sido utilizada por Arenas para marcar diferencias con lo que, a su juicio, hicieron los socialistas: ahora los implicados asumen su responsabilidad, "no como antes, cuando se miraba para otro lado".

Arenas admitió que "siempre puede haber un comportamiento irregular". Lo que sí ha cambiado, según el secretario general del PP, "y eso es lo importante", es la reacción de los responsables políticos ante las denuncias periodísticas de casos de corrupción. Esta teoría es válida para los dos últimos casos: el del inspector jefe de Cataluña que posee, a través de su mujer, varias cuentas en Suiza que se nutrieron de fondos del grupo Torras, dirigido por el polémico financiero Javier de la Rosa; y el de los dos responsables de Fomento supuestamente vinculados a empresas adjudicatarias de contratos del AVE.

En el primer caso, el inspector José Lucas ha sido suspendido de militancia del PP de Cataluña de manera cautelar. En el segundo, ambos altos cargos de Fomento dimitieron de manera fulminante.

[Respecto a este último caso, el presidente de Renfe, Miguel Corsini, pedirá mañana su comparecencia en la Comisión de Infraestructuras del Congreso para explicar su relación con la empresa constructora Corsán SA, informa Europa Press según fuentes de Renfe. Las mismas fuentes indicaron que Corsini aclarará en la Cámara baja que "no tiene nada que ver" con la adjudicación de obras a Corsán, a pesar de que el fundador de esta empresa es Jacobo Corsini, tío del presidente de Renfe. En este sentido, recordaron que Renfe no participa en la adjudicación de infraestructuras ferroviarias.]

Pero, evidentemente, la "reacción inmediata" no es válida para los responsables de haber concedido a 100 directivos de Telefónica opciones sobre acciones que les han garantizado unos beneficios de 45.000 millones. En este caso, según el criterio de Arenas, no hay responsabilidad política porque se trata de una empresa privada -aunque era pública hasta hace sólo dos años y su presidente, amigo de la infancia de Aznar, fue nombrado por el Ejecutivo- cuya gestión debe ser analizada y juzgada sólo por sus accionistas.

Arenas está convencido de que, pese a todo, el PP está "ganando la batalla de la corrupción" gracias a su rápida reacción. Y por eso cree que el PSOE "se equivoca" si pretende centrar la batalla electoral en este tema, "como hizo en la campaña de las municipales" en junio de este año.

Arenas afirma desconocer cuál será la estrategia socialista, pero aprovechó el día de ayer, en el que se reunió con distintos responsables del PP para empezar a preparar el programa electoral, para anunciar cuál será la de su partido: dedicarán gran parte de su esfuerzo a explicar sus logros, a relatar el "altísimo nivel de cumplimiento del programa" con el que se presentaron en las pasadas elecciones. A contar cómo con el PP "del dicho al hecho no ha habido ningún trecho". Pero también a "comparar" su gestión en el Gobierno con la de otras épocas.

Es de esperar, por tanto, que los populares preparen más iniciativas en la línea de la polémica campaña de las pensiones, algo que en el PP consideran mera "información a los ciudadanos".