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La Comunidad proyecta abrir el primer centro especializado en cocainómanos de España

El gerente de la Agencia Antidroga, José Cabrera, anunció ayer en la Comisión de Sanidad de la Asamblea regional que la Comunidad de Madrid proyecta abrir un centro de atención especializada a cocainómanos. El proyecto es el primero de atención integral a cocainómanos en España, según confirmó ayer Javier Hernández, portavoz del Plan Nacional sobre Drogas, que avala el programa. Su apertura está condicionada a que el Gobierno regional incluya los 120 millones de pesetas que se necesitan en los presupuestos para el año 2000, que ahora se debaten.

La última encuesta del Plan Nacional sobre Drogas revela que la demanda de un tratamiento para consumidores de cocaína ha aumentado un 17%. Sin embargo, ahora, para estos toxicómanos sólo existen plazas aisladas dentro de los centros de atención a drogodependientes. El plan calcula que hay 600.000 consumidores de cocaína en España, muchos de ellos esporádicos. Su número se ha estabilizado, salvo un pequeño aumento entre los adolescentes.El centro para cocainómanos previsto en Madrid seguirá el modelo de uno que ya existe en Los Ángeles (Estados Unidos), aunque con adaptaciones. Contará con 40 plazas y estará ubicado a las afueras de la capital, según informa Europa Press. El gerente de la Agencia justificó la necesidad de este nuevo recurso "porque la cocaína es una amenaza para la que no existe ninguna estrategia asistencial ni preventiva", informa Servimedia.

Cabrera manifestó que el aumento de la demanda de atención por parte de los cocainómanos no se debe sólo a un crecimiento del consumo, sino también a una mejora de la oferta asistencial para estos drogodependientes.

El portavoz del grupo PSOE-Progresistas, Eduardo Sánchez Gatell, valoró la creación de este nuevo servicio, pero acusó al Gobierno de Alberto Ruiz-Gallardón de no haber previsto recursos. "Les ha estallado el problema de la cocaína en la cara sin enterarse. No han sido capaces de preparar dispositivos ni ideas para atenderlo", añadió.

Sánchez Gatell indicó que en 1997 el número de usuarios atendidos por la Agencia por consumo de cocaína suponía sólo un 5%, porcentaje que, según sus datos, en 1998 creció hasta el 23%. Todos los estudios indican también que cada vez es más frecuente el consumo de cocaína y heroína mezcladas.

Cabrera replicó que el crecimiento del consumo de cocaína es una tendencia que se está dando también en otros países. "Es un problema que nos ha explotado a todos y o triunfamos todos o nos hundimos todos", agregó.

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Juan Ramón Martín Flores, vocal para Madrid de la Unión Española de Asociaciones y Entidades de Atención al Drogadicto (UNAD), ve también con buenos ojos la apertura de este nuevo recurso asistencial. "Ahora no hay ningún dispositivo especial de atención para este tema concreto porque la mayor parte de los centros para drogodependientes están más centrados en los heroinómanos", añadió.

"Sabemos, además, que los adictos a la cocaína suelen ser bastante reacios a juntarse con los heroinómanos", matizó Martín. La UNAD agrupa a 300 entidades de apoyo a toxicómanos, 37 de ellas en Madrid.

"Narcosalas"

El gerente de la Agencia también se refirió ayer a otro de los últimos y más polémicos proyectos de su departamento: el de abrir salas donde los toxicómanos más desarraigados puedan consumir droga bajo control higiénico y sanitario. Las llamadas narcosalas. Indicó que las negociaciones con el Ayuntamiento de Madrid para poner en marcha este nuevo recurso "se encuentran muy avanzadas".Cabrera afirmó que una de las dudas del Ayuntamiento para permitir la apertura de estos recintos se refiere a las posibles consecuencias legales que pudieran derivarse para las instituciones si un drogodependiente fallece mientras consume en ellos. La cuarta teniente de alcalde, María Tardón, expresó alguna de estas dudas municipales al gerente de la Agencia el martes durante el Consejo Regional de Seguridad.

Cabrera prevé que una de las narcosalas se ubique en los alrededores del poblado marginal de Las Barranquillas, en Vallecas Villa, que se ha convertido en uno de los principales puntos de venta de droga de la ciudad ahora que se ha iniciado el desmantelamiento de otros núcleos como La Celsa y La Rosilla.

El problema reside en que las asociaciones de vecinos de Vallecas Villa se muestran contrarias a la apertura de estos recintos en su distrito y proyectan celebrar un referéndum.

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