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El 57% de los alumnos que comienza a estudiar en Navarra lo hace en euskera o en modelo bilingüe

El Gobierno de Navarra creará este año una sección específica dentro del Servicio de Vascuence del Departamento de Educación para evaluar mejor la didáctica y los programas de la enseñanza en lengua vasca en esta comunidad. El creciente y sostenido aumento del número de alumnos cuyos padres han elegido educarles íntegramente en euskera (modelo D) o que comiencen a aprender euskera desde los tres años al menos como asignatura (modelo A) han llevado a las autoridades educativas a reforzar la atención hacia los estos modelos lingüísticos.

El objetivo, según ha señalado el consejero de Educación del Gobierno foral, Jesús Laguna (UPN), es "asegurar que los alumnos que estudian en estos modelos obtengan las mejores competencias lingüísticas porque el vascuence es algo nuestro y debemos garantizar los mejores niveles de enseñanza posibles". Laguna es uno de los nuevos consejeros del Gobierno de Miguel Sanz. Sucede a Javier Marcotegui, que abandonó la cartera educativa por deseos propios y precedido de fuertes polémicas en la pasada legislatura con sectores del profesorado, centros y padres de alumnos en lengua vasca. Laguna, procedente del reformismo y el CDS, se estrena este curso al frente de una de las áreas más problemáticas del gabinete regionalista. Los alumnos navarros han comenzado esta semana a regresar escalonadamente a las aulas. El modelo D (euskera con lengua española como asignatura) es el que más ha crecido entre los niños de tres años matriculados en las redes privada y pública. Son 1.334 escolares, un 1,6% más que el curso pasado. El modelo A (castellano con euskera como asignatura) crece un 0,7% y tiene 1.324 alumnos. El modelo G (sólo en castellano) sufre un descenso del 2,3% y tiene 1.468 nuevos alumnos. La escuela navarra refleja este curso un pequeño punto de inflexión en su prolongado descenso de alumnado. Son 65.485 alumnos de enseñanzas obligatorias, la cifra más alta del último lustro motivado por el incremento de niños matriculados con tres años de edad. Sin grandes variaciones, las cifras de matriculación constatan la supremacía de los modelos de estudio en o con lengua vasca como asignatura (57% del total). No obstante, las cifras están sometidas a la vigente zonificación que impone la Ley foral del Vascuence, que divide Navarra en tres zonas lingüísticas. En función de esa ley el modelo A es el único que la red pública ofrece en prácticamente la mitad del territorio. El modelo D sólo es obligatorio en la escuela pública en el tercio norte o zona vascófona. El 61% de escolares está matriculado en centros públicos. El alumnado entre los tres años y el bachillerato LOGSE se divide prácticamente al 50% entre los que estudian sólo en castellano, con una ligera ventaja de estos, y los que sólo lo hacen en lengua vasca o la tienen como asignatura. Las asociaciones de padres cuyos hijos estudian euskera, como Sortzen, demandan la modificación de la ley del Vascuence para derogar la zonificación idiomática que impone. Además, unos 500 alumnos de ikastolas ubicadas en áreas no vascófonas estudian en una situación de alegalidad que la Federación Navarra de Ikastolas exige solucionar cuanto antes.

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