"Será mi segundo y último mandato"
Nada más confirmarse su triunfo, Rafael Puyol desveló uno de sus secretos mejor guardados durante las dos semanas de campaña: el segundo mandato será el último al frente de los designios complutenses. "Cuatro años se pasan en un vuelo, casi sin darse cuenta. En cambio, ocho años constituyen un periodo razonable, a mi juicio, para llevar adelante un proyecto de gobierno universitario. Más, serían demasiados", razonó. La argumentación le emparenta con la que maneja para la presidencia de la Comunidad de Madrid Alberto Ruiz-Gallardón, el que pudo ser su jefe político: hace cuatro años le ofreció una consejería regional, la de Medio Ambiente, que Puyol rechazó.El rector, experto internacional de Geografía Humana, reconoció que no había querido desvelar esta decisión hasta después de las elecciones. "No deseaba enturbiar la campaña con elementos ajenos a lo verdaderamente importante, los programas de los distintos candidatos", argumentó. Por lo demás, su relación con Ruiz-Gallardón se ha enturbiado con la declaración de la Universitaria como Bien de Interés Cultural.
El triunfo electoral de ayer fue mucho más amplio y sencillo que el de noviembre de 1995, cuando la sucesión de Gustavo Villapalos disparó el número de candidatos y las acusaciones, en ocasiones envenenadas, entre ellos. El proceso electoral que ahora termina ha sido reposado, puede que en exceso: ni un debate, ni un ruido, ni un elemento que desatara lecturas enfrentadas y apasionadas.
Puyol Antolín, padre de cuatro hijos, se confiesa aficionado a la música clásica (que en su despacho suena en segundo plano, ininterrumpidamente) y apasionado del pádel, un deporte que procura practicar todas las tardes. Shakespeare es su literato favorito y Horacio, el autor de la cita que mejor refleja su carácter perseverante: "Lo que hace falta es tratar de someter a las circunstancias, no someterse a ellas".
