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Antonio López y Julio López Hernández escogen 60 obras de su amigo Lucio Muñoz

El Hospital de los Venerables de Sevilla presenta una retrospectiva del desaparecido pintor

Margot Molina

El pintor Antonio López y el escultor Julio López Hernández se sintieron ayer ajenos al papel de comisarios que les tocó desempeñar en la inauguración de la exposición retrospectiva de Lucio Muñoz. Ambos preferían presentarse como amigos del desaparecido pintor informalista y como tales han participado en la selección de 60 obras que se muestra en el Hospital de los Venerables de Sevilla, sede de la Fundación Focus. La exposición, la primera que se realiza después de la muerte de Lucio Muñoz, abarca todo su periodo creativo, de 1950 a 1998. "La materia adquiere en él una hondura espiritual única. Lucio ha sido, sobre todo, un pintor religioso, aunque él no lo pretendiera", dijo Antonio López sobre su amigo.

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Lucio Muñoz (Madrid, 1929-1998) se consolidó, tras la antológica que realizó en el Centro de Arte Reina Sofía de Madrid en 1988, como uno de los grandes del informalismo español. "Es emocionante ver cómo se forma un pintor y en esta muestra puede verse claramente. Entre el primer óleo que se cuelga, Bodegón de las uvas, de 1950, y las pinturas sobre tabla de 1958, él ya había encontrado su propio espacio", comenta entusiasmado Antonio López, quien también ha expuesto en las salas de la Fundación Focus."Su evolución, como la de todos nosotros, partió de una formación neutra. Aunque fue un hombre con mucha sensibilidad, en aquellos primeros años no teníamos posibilidad de ver en directo lo que se hacía fuera y compartíamos un lenguaje más o menos académico. La figuración era algo común y decisivo para él hasta que encontró su voz y su material, la madera. Así llegó a la abstracción con una naturalidad asombrosa", afirmó el pintor realista, amigo de Lucio Muñoz desde los años cincuenta.

La muestra, que inauguró ayer el ministro de Educación y Cultura, Mariano Rajoy, estará en Sevilla hasta el 9 de mayo. Después podrá verse en las salas de la Fundación Central Hispano de Madrid, desde mayo a julio, y terminará en el Museo San Telmo, de San Sebastián, donde se expondrá desde julio hasta septiembre. Esta retrospectiva, patrocinada por el Banco Central Hispano, es algo que Lucio Muñoz había comenzado a preparar antes de su muerte. "Él había realizado una primera selección para una gran exposición, pero no se había fijado una fecha. Nosotros hemos respetado casi un 60% de los lienzos que él eligió", explicó Julio López Hernández.

La gran novedad de esta retrospectiva son los 15 dibujos que se muestran por primera vez y que están llenos de anotaciones del propio artista.

"Los dibujos los hizo como apoyo de algunos cuadros entre 1974 y 1979; después cogió confianza y no necesitó el apoyo de los bocetos", explica López. "Sólo utiliza el dibujo como tránsito cuando está buscando la solución a un problema", añade López Hernández.

"Una vez que abandonó los bocetos, sus cuadros fueron creciendo. He visto a Lucio volver un cuadro al revés, convertir en oscuro lo claro. Nada le daba pereza, tenía una movilidad fascinante ante una obra", recuerda Antonio López.

"Desde el impresionismo, el cuadro se hace sin bocetos. Es una de las grandes diferencias que tenemos con el arte antiguo. Velázquez tampoco hizo muchos bocetos, su pintura partía de sí misma", afirma López, que, como su colega López Hernández, estaba ayer exultante ante la visión de las grandes pinturas del amigo común en un lugar tan barroco como el Hospital de los Venerables. La sacristía de este conjunto conserva la última obra del pintor barroco Juan Valdés Leal, un trampantojo que muestra a un grupo de ángeles sosteniendo la cruz.

"Es una suerte para el público poder contemplar las obras de Lucio Muñoz en un espacio como éste, tan luminoso y lleno de poesía y tan diferente a la sobriedad de Castilla en la que él trabajó", dice Antonio López.

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Sobre la firma

Margot Molina
Ha desarrollado su carrera en El PAÍS, la mayor parte en la redacción de Andalucía a la que llegó en 1988. Especializada en Cultura, se ha ocupado también de Educación, Sociedad, Viajes y Gastronomía. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Ha publicado, entre otras, la guía de viajes 'Sevilla de cerca' de Lonely Planet.

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