Los intelectuales portugueses despiden a Cardoso Pires
Lisboa despidió ayer a José Cardoso Pires. Los restos mortales del escritor portugués fueron incinerados en el crematorio del Alto de San Joao y, posteriormente, fueron trasladados al Mausoleo de los Escritores, en el cementerio de los Placeres de Lisboa. Los máximos representantes del país, sus colegas y amigos despidieron al escritor entre aplausos y lágrimas. El presidente de la República, Jorge Sampaio, recordó que Cardoso Pires "fue alguien que supo percibir el notable cambio de la sociedad portuguesa, especialmente su evolución desde el oscurantismo hacia una realidad abierta".El ministro de Cultura, Manuel Maria Carrilho, subrayó la enorme pérdida que supone la desaparición de Cardoso Pires para las letras portuguesas y, sobre todo, "su especial contribución para nuestra modernidad".
Entre los asistentes al funeral se encontraban también su amigo el escritor António Lobo Antunes; el alcalde de Lisboa, Joao Soares; o el fadista Carlos do Carmo, quien leyó algunos poemas de despedida.
Los restos del novelista de Balada de la playa de los perros y De profundis. Valsa lenta, descansan en el cementerio de Los Placeres junto a otros de sus insignes colegas como Aquilino Ribeiro, Fernando Namora o Natalia Correia.
