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La plataforma contra la incineradora de Agost pide unidad a los vecinos para evitar la reapertura

Que Agost actúe como Fuenteovejuna. Todos los vecinos unidos contra la reapertura de las actividades de la incineradora de productos sanitarios hospitalarios, que posibilitará el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana, que el pasado lunes emitió una sentencia favorable a los intereses de la empresa Sinde, propietaria de la planta. Ese fue el mensaje que lanzaron ayer los portavoces de la plataforma vecinal contra la incineradora, a los cerca de 200 vecinos que acudieron a la primera asamblea de la plataforma desde diciembre de 1997.

La asamblea que ayer tuvo lugar en la Casa de la Cultura de Agost, en la comarca de L"Alacantí, se convocó tras conocerse, el pasado lunes, una sentencia del Tribunal Superior de Justicia en la que se condena al Ayuntamiento del municipio a indemnizar con 42 millones de pesetas a la firma Sinde por decretar el cierre de la empresa a mediados de 1995, sólo tres meses después de que hubiera autorizado su apertura. Uno de los portavoces de la plataforma, Felipe Vicedo, pidió a los vecinos que mantengan una triple actitud: "Calma, alerta y unidad". Las tres fueron presentadas como condiciones sine qua non para continuar con una estrategia de desgaste en la que perderá, según Vicedo, "el primero que se canse". Asegura Vicedo que la batalla "se está ganando, porque desde 1994 la planta ha estado abierta tres o cuatro meses". Emili Boix, otro de los portavoces de la plataforma, denunció que Agost ha sido tratado por las administraciones públicas "como si formara parte del Tercer Mundo". Boix se refería al sentir generalizado de que el pueblo fue elegido como destino de la planta incineradora "porque se creían" que eran "tontos". Y añadió: "Sin embargo, hemos recogido 2.700 firmas de un censo de 4.000 habitantes, lo que indica que tenemos el apoyo del 80% de la población adulta del municipio". En octubre de 1994 el Ayuntamiento de Agost acordó en sesión plenaria conceder la licencia de apertura a la Planta Incineradora de Residuos Sanitarios Sinde. Se decretó que el complejo iría ubicado en el polígono industrial de Agost a unos 200 metros del perímetro del casco urbano. La empresa comenzó en consecuencia las labores de incineración de residuos sanitarios procedentes de centros hospitalarios a principios de 1995. Tres meses después el rechazo manifiesto de la mayor parte de la ciudadanía y la intensa labor reivindicativa de algunos grupos ecologistas motivó la celebración de un nuevo pleno en el que se declaró "lesivo al interés público" el acuerdo municipal adoptado en octubre. Posteriormente, el Consistorio de Agost solicitó al Tribunal Superior de Justicia la anulación del acuerdo y decretó el cierre de las instalaciones. Ante esta situación Sinde interpuso un recurso contencioso-administrativo contra el Ayuntamiento, que es precisamente el que ha recibido un fallo favorable por parte del alto tribunal. Felipe Vicedo señaló que "mientras no salga humo de la planta seguiremos en calma". En el momento en que la incineradora comience a funcionar de nuevo, como es la intención de Sinde, la plataforma planteará la puesta en marcha de las acciones que acordaron en su penúltima asamblea. Dichas medidas consisten en una huelga de madres que se negarán a llevar a sus hijos al colegio, y la negativa del pueblo en bloque a pagar impuestos.

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