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Tecla Sala abrirá la próxima temporada con una reflexión sobre la historia de L"Hospitalet

L"Hospitalet de Llobregat tiene un pasado marcado por ser un lugar de tránsito y a la vez de acogida de forasteros. El artista malagueño Rogelio López Cuenca ha indagado sobre la historia de una ciudad que durante años ha parecido una población despersonalizada. El resultado de este acercamiento poético y artístico a la ciudad será la exposición Nowhere, que se presentará en el Centro Cultural Tecla Sala, como apertura de temporada, a partir del 15 de octubre.

Mientras en el Centro Cultural Tecla Sala prosiguen los trabajos de reforma de su nave principal, obra del estudio de arquitectura Viaplana-Piñón y cuya finalización está prevista para la próxima primavera, la Sala Molí, dedicada habitualmente a las exposiciones de artistas jóvenes o las de pequeño formato, acogerá el paquete de exposiciones de la temporada 1998-1999 en Tecla Sala. El despegue se producirá con la presentación del trabajo desarrollado por el poeta, filólogo y artista Rogelio López Cuenca sobre la ciudad de L"Hospitalet de Llobregat. Su reflexión se inició con un curso sobre arte público, cuya primera parte impartió en Tecla Sala dentro de las actividades de la Quincena de Arte de Montesquiu (Quam). La segunda parte del curso se desarrollará a mediados del mes de septiembre y consistirá en unas intervenciones efímeras de los alumnos en espacios de la ciudad. "La intervención del espacio público dentro del arte contemporáneo tiene que ser temporal, si no la obra se convierte en parte del paisaje para siempre", comenta el artista. Con relación a la exposición Nowhere, que se celebrará entre el 15 de octubre y el 22 de noviembre, López Cuenca no pretende hacer un recorrido histórico por la ciudad, sino expresar de forma artística algunos conceptos ligados a la población, como la de haber sido tradicionalmente un lugar donde los peregrinos hacían un alto antes de entrar en Barcelona, que la ciudad estuviera cruzada por caminos y la vía férrea, y que desde los años treinta acogiera a gran parte de la emigración que se instalaba en Cataluña. "Cuando vine a esta ciudad me habían insistido en que no era más que una ciudad dormitorio y he podido descubrir una historia rica y profunda", comentó López Cuenca. Tras la exposición de López Cuenca, el 3 de diciembre se inaugurará la exhibición ¿Porqué tengo que preocuparme por una chica que se rasca en donde le pica? Un siglo y medio de arte moderno en mi programa de doce pasos, que mostrará la crítica feroz al mundo del arte del filipino Manuel Ocampo. En sus exposiciones, los cuadros no se cuelgan en la pared. Su lugar natural de colocación es el suelo de la sala, con lo que el visitante no tiene otro remedio que pisar la obra artística en un acto de desacralización total del mundo del arte. Del 25 de febrero al 25 de abril, la Sala Molí, junto a las dependencias administrativas que la rodean, sufrirá una transformación ya que se colocarán diversas piezas que provocarán la reflexión sobre cuándo una obra de arte deja de serlo y se convierte en un mero objeto decorativo. La exposición De coraz(i)ón contará con la presencia de la obra de Dis Berlin, Charo Pradas, García Sevilla y Iacobelli, entre otros. La última exposición de la temporada será la presentación de una antológica de la fotógrafa norteamericana Francesca Woodman, que se suicidó en 1981 a los 22 años de edad. "Hace tiempo que quedé impresionada por la obra de esta artista, que en apenas cuatro o cinco años pudo desarrollar una excelente obra", explicó la directora artística de Tecla Sala, Victoria Combalía. La obra de esta artista es totalmente desconocida en España.

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