El Gobierno canario logra pacificar el sector de la enseñanza
Tras largos meses de conflicto en la enseñanza secundaria y universitaria de Canarias, caracterizados por numerosas movilizaciones, jornadas de paro, sucesivas reuniones de la mesa de negociación y posteriores rupturas, el Gobierno autonómico ha logrado rebajar por fin, coincidiendo con el final de curso, el nivel de conflictividad existente en el sector de la enseñanza en las islas.La cuestión universitaria, centrada en la reivindicación de homologación salarial de los docentes de ambas universidades (La Laguna y Las Palmas de Gran Canaria) con el resto del funcionariado autonómico de igual categoría, entre ellos el profesorado de secundaria, ha encontrado una solución negociada tras el principio de acuerdo alcanzado esta semana entre el Gobierno y el profesorado. El dictamen del Consejo de Estado, en el sentido de que Canarias carece de competencia para aumentar el sueldo de los docentes universitarios, ha propiciado la consecución de este acuerdo por el que el colectivo renuncia a una homologación generalizada y admite subidas salariales individuales previa evaluación de su actividad docente e investigadora.
Por ello, para el conflicto de la enseñanza secundaria, más largo y virulento, y por el que este profesorado mantiene un pulso con las autoridades educativas por el sobreesfuerzo que implica para ellos la aplicación de la reforma de Canarias, la Consejería de Educación y Cultura del Gobierno autónomo ha optado por buscar una solución política, ante la imposibilidad de alcanzar un acuerdo con los comités de huelga y sindicatos del sector.
Así, Coalición Canaria presentará la próxima semana una proposición de ley en el Parlamento regional, en la que pretende establecer las normas mínimas que han de regir el funcionamiento de los centros de enseñanza.
