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Ortuondo hace tabla rasa con las compatibilidades de los funcionarios

El alcalde de Bilbao, el peneuvista Josu Ortuondo, zanjó ayer cualquier duda sobre el futuro de los funcionarios municipales que disfrutan de otros trabajos y decidió hacer tabla rasa. En la reunión de la comisión de gobierno de ayer, con la asistencia de los representantes de su propio partido, el PSE e Izquierda Unida, el alcalde de la capital vizcaína terminó su trabajo de desautorización del concejal de Recursos Humanos, el también peneuvista Vicente Bilbao, y desestimó cualquier solución de compromiso para los altos funcionarios (como es el caso de los médicos). Ortuondo era consciente de que cualquier otra medida hubiera puesto en peligro la supervivencia del pacto tripartito, que gobierna la ciudad desde el pasado mes de enero. Las presiones de los médicos, que ofrecían una rebaja de sus salarios públicos con tal de poder seguir ejerciendo en el sector privado, convenció a Bilbao, pero no al alcalde, quien ahora ha cerrado la puerta a las compatibilidades de todos los funcionarios. El alcalde tampoco considera pertinente esperar al desarrollo de la ley de la función pública en el Parlamento de Madrid. Ortuondo exige que las compatibilidades que fueran susceptibles de ser concedidas (como es el caso de los docentes) sigan rigiéndose por la legislación actual, sin hacer excepciones en base a futuribles. Todos aquellos que quieran compatibilizar sus trabajos públicos en el consistorio bilbaíno, tendrán ahora que presentar su posición ante la Comisión III, que analizará cada caso, a la luz de los informes elaborados por el equipo jurídico municipal. Si se descubriera a algún funcionario desarrollando alguna actividad remunerada aparte de su trabajo municipal, el alcalde ha advertido que se le abrirá el correspondiente expediente disciplinario y el pleno municipal determinará las sanciones que correspondan en cada caso. Dudas en el PNV La anunciada salida de la alcaldía de Ortuondo, quien ha prometido reincorporarse a su trabajo en el Banco Bilbao Vizcaya, al final del presente mandato municipal, ha suscitado numerosas incógnitas. En el propio Partido Nacionalista Vasco, aún no se sabe quién podría ocupar esa vacante, en una plaza electoral de la importancia de Bilbao. Desde hace algunos meses se maneja la hipótesis de que el presidente del Consorcio de Aguas Bilbao-Vizcaya, Juan José Olabarría, o el actual consejero de Sanidad, Iñaki Azkuna, podrían sustituir a Ortuondo en la cabecera peneuvista para las elecciones municipales de la próxima primavera. La gestión de Olabarría en el Consorcio de Aguas está recibiendo muchas críticas y Azkuna no tiene el apoyo de todos los sectores del PNV vizcaíno. La opción de que Ortuondo vuelva a postularse a la alcaldía de Bilbao, a la que accedió tras el polémico José María Gorordo, está cobrando, según las fuentes informantes, cada vez más fuerza.

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