Un homenaje itinerante
En el pueblo de la sin par Dulcinea empezó anoche Don Quijote su peregrinación por La Mancha, como un homenaje a su creador. En esta obra de teatro, el mismo Miguel de Cervantes Saavedra cuenta la historia actuando como una especie de titiritero. "Intenta rehacer el acto de creación del hombre a través del arquetipo de Don Quijote y Sancho Panza", afirma la directora de la obra, la rumana Catalina Buzoianu.En esta versión de Don Quijote trabajan actores de diferentes grupos de teatro, como Fénix de Albacete, Escarramán de Guadalajara y CAL Teatro de Alcázar. La presentación en El Toboso fue estreno. Mañana el espectáculo se presentará en Villarrubia de los Ojos y el martes en Alcázar de San Juan, donde se realizan los ensayos desde el mes pasado. La obra seguirá, en fechas aún sin confirmar, por algunos pueblos de La Mancha como Campo, de Criptana, Daimiel, Tomelloso y Argamasilla de Alba. Esta semana se confirmará su participación en algunos festivales de Rumania y en octubre se presentará en el Festival Sur de Madrid.
Buzoianu es conocida en España por su participación en las dos últimas ediciones del Festival Internacional de Sitges: en 1996 con la pieza La Gaviota, de Chéjov, y en 199.7 con El pelícano, sobre un texto de Strindberg. Ambas con buena crítica de los especialistas y acogida del público. Su interés en Don Quijote viene de varios años atrás cuando dirigió un taller teatral sobre este personaje en la ciudad medieval de Sighisoara (Rumania).
Identidad
Para la directora, en este "espectáculo contemporáneo, Cervantes y Don Quijote, el personaje y su doble, o sea la Locura del Espíritu y la Sabiduría del Cuerpo, hallan una única identidad en el aventurero genial que se derritió en su sustancia de carne y ensueño".
Es más, Buzoianu se pregunta: "¿Quién es Cervantes? ¿Quién es Don Quijote? ¿Y Panza?", y de inmediato se responde: "Es el hombre contemporáneo de todas las épocas, atravesándolas en una infinita búsqueda de sí mismo".
El montaje de la obra se concretó en julio durante el pasado Festival de Almagro, cuando José Monleón, del Instituto Internacional. de Teatro del Mediterráneo (IITM), le propuso a Buzoianu desarrollar esta idea familiar para ella. Al proyecto se unieron el Ayuntamiento de Alcázar de San Juan, la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y la Diputación de Ciudad Real.
