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"Me vi forzado a huir del temor horrible a la repetición"

Cerca del aire (1988-2018) es un álbum singular, entre los que se pueden considerar discos recopilatorios. 21 Japonesas, con el donostiarra Txetxo Bengoechea como único miembro titular, han hecho versiones totalmente nuevas de sus temas originales. Es una mirada atrás que recoge toda esa cosecha y la actualiza. "No estoy de acuerdo en que se llame recopilatorio a este disco, para mí es una recomposición", explica el compositor y cantante. "No hay una sola armonía de las originales que esté repetida".Hacer nuevas versiones de los temas es algo que no tendría mayor relevancia si el resultado de este experimento no fuera tan sorprendente. "Ha sido ponerse en un punto cero para partir de allí otra vez", afirma Bengoechea. "Normalmente, en la composición lo ideal es librarte de prejuicios y de referencias e ir virginal al proceso de la composición. Pero en este caso, llegar a este punto cero ha sido dificilísimo porque he tenido que convivir con muchos fantasmas de otras épocas".

La explicación tiene que ver con un complejo proceso psicológico. "Al acabar Fuego dulce, el anterior disco, y la gira, hace dos años, empecé a tener la sensación de que en el horizonte se empezaba a perfilar la repetición". "El temor horrible a la repetición", insiste. "Decidí cambiar de ciclo, reposar y reflexionar, porque todavía soy un romántico de esto y pretendo hacer las cosas con corazón y poder mirar a la gente a los ojos para defender lo que hago. Me puse un espejo delante y empecé un ejercicio de autocrítica muy dura. Entonces surgió la idea de recomponer, que es como la posibilidad de reescribir algo".

Esta reescritura no significa un menosprecio de lo que había hecho hasta ahora. "No es que no me gustaran mis viejos temas, sí me gustaban", afirma. "Con todas sus imperfecciones, los sonidos muy flojitos de las primeras grabaciones tenían un componente de naturalidad muy especial, muy primitiva a veces. Respecto a esos temas me siento bien porque lo primero que he tenido claro ha sido conservar el respeto a las fuentes originales de esos temas", dice. "He intentado hacer un disco más contenido que los anteriores. Más sensible y más jodidamente profundo, porque es un poco hiriente a veces".

Hay un solo tema nuevo en este álbum. Se titula Media vida en un volcán y habla del País Vasco. "Con este tema pretendo decir algo que tenía la necesidad de decir. Yo soy de Donosti y tengo la sensación de que nos cubre una nube muy oscura, que no deja pasar la luz. Intento no decir a nadie lo que tiene que pensar, pero creo que en algo podemos estar de acuerdo muchos, y es que da la sensación de que no se quieren arreglar las cosas por ninguna parte".

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