Peregrina en el Camino de Santiago
, Shirley MacLaine confiesa que una de las experiencias más importantes de su vida fueron los 30 días que pasó en el verano de 1994 recorriendo en solitario el Camino de Santiago. Andaba 25 kilómetros diarios y dormía en iglesias y albergues. Desde Roncesvalles, en el pirineo francés, hasta Santiago, la actriz logró superar, gracias a la ruta jacobea, una fuerte crisis espiritual.
"El Camino ha sido esencial en mi vida. Fue extraordinario. Hacer el Camino no tiene nada que ver con ninguna religión. No significa hacerse católico ni es un paso para conocer al Papa. El Camino es el peregrinaje de quien quiere caminar consigo mismo para encontrarse. Conocí a gente fabulosa, pero los periodistas españoles resultaron ser insoportables, no podía entender por qué no me dejaban en paz. No entendían que era un viaje solitario, no me respetaron, se metían hasta en mi ducha y eso cambió mucho mi imagen de España. La prensa norteamericana jamás hubiera llegado tan lejos".
La protagonista de Irma la dulce, El apartamento o Como un torrente se convirtió en peregrina de la ruta jacobea por prescripción facultativa de su amiga la psicoterapeuta brasileña Ann Sharp, autora del libro O caminho da magia.