_
_
_
_
_

El dilema kurdo

La crisis kurda demuestra tanto el fracaso de la comunidad internacional para solucionar los problemas aparcados tras la guerra del Golfo, como la capacidad del movimiento de liberación kurdo para ser su peor enemigo. A pesar de su clara identidad, los kurdos son la minoría que menos éxito ha obtenido en ser reconocida. ( ... )El origen externo de esta crisis resulta del intento de Irán de sacar ventaja de la debilidad iraquí en la zona kurda. Pero empezó con una nueva ronda de luchas de facciones entre los dos grupos principales -el Partido' Democrático del Kurdistán (PDK) y la Unión Patriótica del Kurdistán (UPK)- y con la deserción del clan sourtchi, afiliado al PDK, a la UPK, después del asesinato de su líder en junio. Irán ha apoyado militarmente a la UPK, aunque aparentemente más ( ... ) por fortalecer su propia diplomacia, ofreciendo sus buenos oficios para reconciliar a las facciones kurdas.( ... )

La guerra del Golfo dejó a Irak en un limbo que los aliados han sido incapaces de resolver. Sadam sigue en su puesto, no se sabe si porque los aliados lo prefieren como un baluarte contra lo desconocido. ( ... ) Ahora, Sadam plantea un nuevo dilema: si no se aprovechara demasiado de sus ventajas, EE UU y sus aliados probablemente preferirían dejar el agua correr. Sin embargo, con unas elecciones presidenciales dentro de dos meses, la inacción puede ser demasiado peligrosa. ( ... )

, 2 de septiembre

Cuando un tema da mucho que hablar, lee todo lo que haya que decir.
Suscríbete aquí

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_