_
_
_
_
_

Un funcionario y un guardia civil, detenidos en Barbate por narcotráfico

La Guardia Civil ha intentado cerrar el agujero que había encontrado la droga en Barbate (Cádiz). Agentes de la Unidad de Interior desarticularon el pasado miércoles una red de narcotraficantes que operaba en esta población pesquera, convertida en un punto de entrada masiva de hachís procedente de Marruecos. En la operación, denominada Bazooka, fueron detenidas cinco personas, entre ellas un guardia civil de Barbate y el jefe del servicio de Protección Civil de la localidad.

La operación partió del aumento notable del tráfico de hachís desde hace más de un año en las costas barbateñas. Veinticuatro kilómetros de litoral muy próximos a Marruecos y que sólo cuentan con dos agentes de la Guardia Civil para su vigilancia, según recordó ayer el alcalde, el independiente Serafín Núñez.Las detenciones culminan una investigación que ha durado meses y que comenzó tras las quejas de las autoridades locales y la propia cofradía de pescadores. Inicialmente, se atribuyó el inusitado aumento de hachís a la presión policial en la zona contigua del Campo de Gibraltar. Pero esta posibilidad ha quedado descartada al comprobarse que los traficantes pudieron escoger esta ruta fundamentalmente por la red de colaboradores en la población.

De hecho, se atribuye al guardia civil detenido, Antonio Martínez, su presunta colaboración al informar sobre el movimiento de las patrullas y otros datos esenciales para facilitar el contrabando. La incorporación de otros individuos, bien situados en la sociedad barbateña, pudo constituir el tejido idóneo para que las entradas de hachís fueran fluidas y masivas.

El agente ahora detenido participó en varias aprehensiones de droga, que, en la mayoría de los casos, se encontraba abandonada en las playas, sin que se practicasen nunca detenciones destacadas, en lo que puede interpretarse como entregas controladas para justificar estadísticamente la eficacia de su trabajo.

Presión de los pescadores

En un primer momento, ante la presión social, la propia Guardia Civil manejaba como hipótesis para explicar el inusitado tráfico el amarre forzoso de la flota pesquera por la falta de acuerdo con Marruecos, circunstancia que se prolongó buena parte del año pasado y que dejó inactivo a un colectivo de más de 1.000 pescadores.Sin embargo, fueron los propios pescadores los que de forma reiterada solicitaron a las autoridades mayor vigilancia policial, tanto del recinto del muelle pesquero como del litoral, para acabar con este fenómeno. Paralelamente, se puso en marcha la investigación interna.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Entre los detenidos figuran el jefe de Protección Civil, Sebastián Muñoz Gómez; Francisco Ramos Malia, industrial dedicado a la acuicultura; su esposa, Francisca Infante, así como José Ramírez, mecánico.

Ayer aún no se había facilitado una versión oficial del suceso, que no ha cogido de sorpresa a los vecinos de Barbate. Su alcalde era el primero en reconocer que "Ia sorpresa no ha sido tanta, ya que se rumoreaba que gente bien situada en las fuerzas de Seguridad del Estado y otros sectores podrían estar implicada".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_