IGS recupera la promoción de Marina Calviá al ejecutar un crédito del BCH por 411 millones
IGS, la gestora de la cooperativa PSV, ha recuperado la propiedad de la promoción le Marina Calviá situada en Mallorca, al ejecutar un crédito hipotecario que por valor de 411 millones de pesetas había concedido el Banco Central Hispano (BCH) para ese proyecto inmobiliario. Para realizar esta operación ha sido necesaria la autorización de la intervención judicial, ya que IGS aún no ha levantado la suspensión de pagos. IGS tratará de hacer frente a sus deudas (entre ellas, 9.000 millones a la propia PSV) con lo que ingrese por la promoción.
IGS tiene entre sus acreedores, además de PSV, al Instituto de Crédito Oficial (ICO), con 8.000 millones, y varias constructores y proveedores. A su vez, PSV le debe a IGS unos 1.000 millones. La gestora, según el expediente de suspension de pagos, tenía un pasivo superior en 14.176 millones al activo.IGS ha pagado esa cantidad con una parte de los recursos que ha conseguido con la venta el pasado mes de abril de la sede social, situada en la calle Orense de Madrid y de la promoción de viviendas de lujo Bressel, situada al norte de Madrid, al grupo público bancario Argentaria. Por ambas ventas, IGS logró unos recursos de 2.600 millones, lo que ha dado liquidez ala gestora.
Según ha explicado Valeriano Gómez, gestor de IGS y de PSV, la operación era muy clara para IGS. "Se trataba de recuperar por 411 millones de pesetas unos activos que valen hoy a precio de mercado más del doble de esa cantidad". En todo caso, como reconoce Valeriano Gómez, el proyecto de Marina Calviá sigue siendo una rémora, ya que en libros de la gestora figuran unas inversiones realizadas de 3.967 millones. Por lo tanto, parece poco probable que se recupere el valor de la inversión inicial, como reconocen los actuales gestores.
La intención de los actuales gestores de IGS es replantear el proyecto antiguo y "ejecutar un proyecto hacia una promoción urbanística de calidad". Para ello ya se han iniciado contacto con el resto de los socios en este proyecto, principalmente promotores inmobiliarios privados (Inmogroup, en el que participan varias cajas de ahorros vascas) con el Ayuntamiento de la localidad mallorquina. Se cambiará el primer plan que se encaminaba hacia un modelo de puerto deportivo y no se descarta promover un concurso de ideas, para dar un mayor valor añadido al nuevo modelo de urbanización. IGS es una gestora que camina hacia su liquidación, pero ésta no se producirá hasta que no se hayan pagado las deudas establecidas en el convenio de acreedores todavía sin aprobar de forma definitiva. Gómez espera que queda aprobado en unas semanas.
La intervención judicial no ha puesto ningún problema a que IGS se quede de nuevo con estos activos. En el listado de acreedores de IGS este crédito hipotecario de Banco Central Hispano era considerado como preferente.
En todo caso, Valeriano Gómez, cree que la suspensión de pagos se levantará en breve. Algunos acreedores tales como el Colegio San Antón o Dragados, pueden al final presentar alguna impugnación al convenio de acreedores. Estas posibles impugnaciones no incidirán para nada en el proceso de construcción de viviendas ya en marcha, señala Gómez.
La suspensión de pagos de PSV, con un pasivo de 18.840 millones de pesetas, se levantó recientemente al aprobarse el convenio de acreedores que fue respaldado por más de dos tercios de los acreedores que han admitido una quita del 25% en sus deudas. El ritmo de construcción de viviendas sigue su curso y el máximo responsable del proyecto cooperativo recalca que en 1997 se habrán acabado las 12.500 viviendas de otros tantos cooperativistas que finalmente se han quedado de los 20.000 iniciales con los que arrancó el proyecto.
