Muere Kiko Ledgard, el más popular presentador de 'Un, dos, tres, responda otra vez'

Kiko Ledgard, el más popular de los presentadores que ha tenido el concurso de Televisión Española Un, dos, tres, responda otra vez, falleció ayer en Madrid a los 76 anos, a causa de un ataque al corazón. Personaje entrañable, con un sentido del humor muy peculiar, ejerció un verdadero magnetismo so

bre el público: llegó a superar ampliamente la cifra de 20 millones de espectadores por programa, ciertamente, en los tiempos en que sólo había televisión pública.Nacido en Perú, Kiko Ledgard llegó por casualidad a España a comienzos de la, década de los setenta. En su país ya había conseguido un gran éxito en los años anteriores con el programa Haga negocio con Kiko, el mismo formato del programa español que le haría famoso. Pero su primera oportunidad ante las cámaras españolas se lo ofreció en 1971 la presentadora Blanca Álvarez, por aquel entonces directora de los espacios infantiles, en el programa Hoy también es fiesta.

Esta periodista recordó ayer el momento en que conoció a Kiko Ledgard: "La noche anterior a conocerle yo había soñado con relojes. Nada más verle me fijé que llevaba varios relojes. Así que nuestro vínculo fue mágico".

Después llegó el Un, dos, tres. Su espontaneidad ante las cámaras y su sentido del humor le convirtieron en uno de los personajes mas populares de la televisión. En TVE también presentó los programas 300 millones y Todo es posible en domingo. En este último trabajó al lado de la presentadora Marisa Medina, que ayer le definió como "una persona agradable, encantadora, amable y muy buen compañero". De igual manera opinó la actriz María Casal, antigua secretaria del Un, dos, tres: "Siempre estaba gastando bromas, haciendo versos, todo con tal de que todo el equipo estuviera a gusto".

. Kiko Ledgard destacó también por sus señaladas, supersticiones, que le llevaban a utilizar un calcetín de color rojo y otro negro, además de lucir dos relojes en la muñeca izquierda y un cronómetro en la derecha.

En 1980, en la clínica estadounidense Mayo, un chequeo lo sentenció a tres meses de vida. Sobrevivió a un infarto de miocardio y a partir de entonces, un marcapasos le guió el corazón. En 1981, la tragedia le amenazó de nuevo. Cayó desde la barandilla de la ventana de un tercer piso de un hotel de Lima (Perú), donde se había subido para que le hicieran unas fotografías divertidas durante la presentación de dos nuevos, concursos. Perdió el pie y se estrelló contra el suelo. Este último resbalón le apartó definitivamente de los plato de televisión.

Kiko Ledgard estaba casado y era padre de 11 hijos. En los últimos años, se dedicó a la publicidad. Los restos mortales de Kiko Ledgard serán incinerados esta tarde en el cementerio madrileño de La Almudena.