_
_
_
_
_

Greenpeace advierte que el reciclado de basuras no justifica los nuevos 'muebles'

La organización ecologista Greenpece considera que el Ayuntamiento de Madrid no puede defender los polémicos muebles urbanos recién instalados por su utilidad para el reciclado de residuos. Y cree una contradicción que se defienda. esta opción cuando Madrid ha decidido incinerar -sus basuras antes que reutilizarlas y transformarlas. Los ecologistas, en un comunicado, se suman a la polémica que se ha desatado en la ciudad por los nuevos muebles, criticados por su tamaño y ubicación y por su carácter publicitario. Y no se privan de ponerles nombres peyorativos, tales como "ovnis" y "artefactos". Juan López de Uralde, director de campañas de Greenpeace, indica en un comunicado de la organización que el Ayuntamiento incurre en una "esquizofrenia informativa con la aparición en la escena madrileña de una serie de objetos no identificados, definidos por sus impulsores como mobiliario urbano".

La organización advierte que, ante la "más que justificada polémica que se ha creado alrededor de estos artefactos, el Ayuntamiento se defiende escudándose en el reciclado, ya que una parte de ellos son contenedores de pilas y vidrio". En la última semana, las críticas de ciudadanos y de la oposición municipal han arreciado, hasta el punto de que el alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, ha reconocido que su criterio no coincidía con el de los técnicos que fallaron a favor de la empresa franco-española Cemumasa para que instalase los muebles urbanos.

La empresa ha aportado a las arcas municipales 2.400 millones de pesetas por la instalación de los 1.572 nuevos muebles, a cambio de explotar los anuncios que en ellos se instalen en los próximos 15 años. Greeripeace recuerda que la mayoría de los muebles no son contenedores, sino "meros soportes publicitarios".

Incineradora

La organización ecologista recuerda que el Ayuntamiento de Madrid ha optado por la incineración como forma de gestión de las basuras: "La construcción de la monstruosa incineradora de Valdemingómez ha sido el principal objetivo del actual gobierno municipal, ignorando las críticas y despreciando a la oposición, ecologista y vecinal".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

López de Uralde insiste en que el hecho de poder devolver sólo el vidrio no es una política de reciclamiento: "En Madrid sólo se recupera una parte de aquello que molestatá a la nueva incineradora. A este Ayuntamiento, lo de las tres erres -reducción, reutilización, reciclado- le trae al pairo".

El comunicado de Greenpeace concluye: "Si el Ayuntamiento de Madrid quiere defender la estética de su mobiliario urbano, que lo haga sin esgrimir argumentos ecológicos". Y sugiere que los nuevos elementos callejeros degradan el medio ambiente urbano: "En muchas ciudades existen contenedores perfectamente integrados en su entorno urbano".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_