González asegura que el PSOE ya ha recuperado cinco puntos desde las europeas y se acerca al PP

El jefe del Gobierno, Felipe González, atribuye el recrudecimiento de los ataques de la posición y de un sector de la prensa -citó al "sindicato del crimen"- a la recuperación electoral del PSOE y a los buenos indicios de la economía. González reveló ayer ante su grupo parlamentario que el PSOE está ya en un 35% en intención de voto -cinco puntos más que en las elecciones europeas de junio pasado-, con lo que el PP le saca sólo un punto y medio, toda vez que los conservado res han perdido en el último trimestre tres puntos . El líder socialista, que manejó cifras del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), añadió que tiene "datos y motivos" para entrar en la "guerra sucia" contra la oposición, pero aseguró que no lo hará.

La recuperación electoral del PSOE -su expectativa es ahora la misma que tenía un mes antes de las elecciones generales del 93, que ganó con el 36,68% de los votos, frente al 34,82% el PP-, la mejora de las relaciones con los sindicatos, la recuperación de la economía y los pactos con CiU fueron los asuntos que durante cuatro horas trató ayer a puerta cerrada el presidente del Gobierno con los diputados y senadores de su grupo. González estuvo acompañado por el vicepresidente del Gobierno, Narcís Serra; el ministro de la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, y los diputados y miembros de la ejecutiva socialista partido Joaquín Almunia, Cipriá Ciscar y Txiki Benegas.Según la versión de González, los ciudadanos han empezado a percibir ya la iniciativa política del Gobierno, porque las encuestas del CIS, correspondientes a noviembre, arrojan para los socialistas una intención de voto del 35%, esto es, un ascenso de cinco puntos desde el verano, lo que los sitúa sólo punto y medio por debajo del PP. Después de ofrecer estos datos, el hilo conductor de su discurso vino a confirmar que el secretario general socialista explica la dureza de los ataques de la oposición por este ascenso.

González indicó que tiene "datos y motivos" para replicar a la oposición por la vía de la "guerra sucia", aunque precisó que no va a hacerlo. Aun así, parece ya claro que no dejará de denunciar ni un sólo momento que el PP e IU "hacen pinza" contra los socialistas. También dejó bastante claro que su intención es seguir gobernando con CiU, y en distintas ocasiones se refirió a ello, según la versión de diferentes parlamentarios.

El líder del PSOE, a preguntas del diputado de la corriente Izquierda Socialista Manuel de la Rocha, aseguró que las relaciones con los nacionalistas -incluyó al PNV- "son fluidas, aunque tienen altibajos".

Relaciones con CiU

En otras dos ocasiones volvió a referirse a CiU para decir que, a corto plazo, la fuerza política de Jordi Pujol debe verse lógicamente tentada a romper sus relaciones con el PSOE, porque de hacerlo, con toda seguridad los ataques que ahora recibe cesarían. Pero, a juicio de González, los nacionalistas catalanes analizan más su conveniencia a medio plazo y no creen que les fuera mejor con un Gobierno del PP. "CiU terne el modelo de Estado y político que defiende esta derecha", indicó.

González no ahorró críticas al PP y se apresuró a descalificar la propuesta sanitaria que el pasado fin de semana defendió el presidente del PP, José María Aznar. Según el dirigente del PSOE, esa propuesta se puede sintetizar en la existencia de dos tipos de sanidad: "Una para ricos y otra para pobres".

Esta confrontación derecha-izquierda es la que le pidieron ayer algunos de sus parlamentarios, como De la Rocha. No obstante, tanto éste como una diputada pusieron en duda la conveniencia de que, en sus contraataques, González se refiera "a los comunistas" en vez de a Izquierda Unida. González reconoció que tiene dudas respecto a seguir en esa dialéctica, dado que sus principales ataques se dirigen a su líder, Julio Anguita, y aprovechó para ironizar sobre la resistencia de Aznar a reunirse con él, en tanto que muestra diligencia para entrevistarse con el coordinador general de IU. Algún comentario irónico también fue a parar a Aznar, de quien González dijo que "solemniza lo obvio".

Varios alcaldes, como Francisco Vázquez, de La Coruña, y el de Cartagena, José Antonio Alonso, abogaron por el cumplimiento del pacto local, frente a los recelos de CiU, y mayor presencia de González en la calle.