La catedral de Vitoria se suma al desplome

JOSÉ LUIS BARBERíA / ÁNGELES GARCíAL plaga que ataca a las catedrales español de un tiempo a esta parte no cesa. La última íctima ha sido la de Santa María de Vitoria, una construcción gótica purista levantada entre los siglos XIII y XV, que ha cerrado sus puertas ante la amenaza de derrumbe detectada por un equipo de expertos dirigido por profesores de la Universidad del País Vasco. El Ministerio de Cultura pretende negociar con la Conferencia Episcopal, las comunidades autonómas y los ayuntamientos afectados un plan director que ataje el deterioro de estos monumentos emblemáticos y que supondría una inversión de 10.000 millones de pesetas en los próximos cuatro años.

Santa María de Vitoria se suma así a la lista de iglesias y catedrales españolas que han alcanzado ya el nivel crítico de deterioro. La polémica creada en torno al estado de las catedrales y a la distribución de los presupuestos ha llevado finalmente al Ministerio de Cultura a anunciar un plan director que ataje el deterioro de estos monumentos y que negociaría con la Conferencia Episcopal española, las comunidades autonómas y los ayuntamientos afectados, según anunció en Palencia Jesús Viñuales, director general de Bellas Artes, informa David Hierro.Viñuales ha cuantificado la inversión en unos 10.000 millones de pesetas durante los próximos cuatro años, "si el resto de las instituciones implicadas están dispuestas a aportar cantidades similares a los 633,5 millones -de pesetas presupuestados por el ministerio con ese fin para l995". El director general indicó que el ministerio ya ha enviado a la Conferencia Episcopal un proyecto de convenio.

La ministra Carmen Alborch, cuando presentó los presupuestos, reconoció que la lírica consumía un capítulo mucho mayor que las catedrales, aunque declinó detallar el reparto del dinero destinado a estos monumentos. Según datos facilitados ayer por el Partido Popular, una primera partida de 73,5 millones se destina a obras, en ejecución, producto de acuerdos ya existentes: Orihuela (3,9), Valencia (23,6), Burgos (16), Jaca (15) y Cuenca (15). La segunda, de 380 millones, es para obras de emergencia: Córdoba (30), Jaca (35), Tarazona (40), Teruel (35), Palma de Mallorca (40), Burgo de Osma (35), León (30), Astorga (40), Cuenca (35), Sigüenza (40) y Seo de Urgel (20). Un tercer capítulo de 100 fflillones cubrirá las emergencias sobrevenidas (parcheos, desplomes menores y otros accidentes) y el cuarto, de algo más de 80 millones es para honorarios de redacción de proyectos, arquitectos y restauradores.

Ayer mismo, el Grupo Socialista del Congreso presentó una enmienda proponiendo inc1dir en los presupuestos del próximo año una nueva partida de 350 millones para las catedrales.

Al igual que otros muchos casos, la catedral de Vitoria, conocida como "la catedral vieja", padece los problemas resultantes de los errores de construcción comunes a las edificaciones góticas. El deterioro, general en el conjunto de la cúpula y más acusado en el crucero, ha abierto grietas considerables de varios metros y las conclusiones del estudio realizado por expertos de la Universidad del País Vasco, en el que se han invertido más de dos años y 33 millones de pesetas, no dejan lugar a dudas sobre la aceleración del proceso y el riesgo real de derrumbamiento. La Diputación de Álava pretende presentar un plan de rehabilitación a la Comunidad Europea a primeros de próximo año para acogerse al programa de ayudas destinada s a la restauración de edificios histórico-monumentales.

Santa María de Vitoria, declarada Colegiata en 1496 y catedral en 1862, alberga un rico patrimonio artístico de pinturas y retablos donado a lo largo de siglos por las poderosas fa milias de la ciudad. Los expertos calculan que el cierre al público se prolongará hasta 1996, vista la necesidad de iniervenir en la cubierta y la estructura misma del edificio.

La morfología específica de Santa María de Vitoria, sus atrevidas proporciones, la inestabilidad de las fisuras y los defectos de las intervenciones realizadas a lo largo de los años, han llevado finalmente a los expertos a aconsejar su cierre. El edificio carece quizás, de la majestuosidad de otras templos españoles, pero tiene a su favor la pureza del estilo gótico, raíces cistercienses y la incoporación de modelos consagrados en el siglo XIII. A las fisuras del crucero se suma otro problema que pone en peligro toda la estructura del templo, informa Eva Larrauri. El peso de la nave central recae sobre unas columnas incapaces de soportarlo, y que ya ha provocado su curvatura. La naturaleza del subsuelo sobre el que se levanta la catedral tampoco ayuda. Los estudios realizados han determinado que sólo parte del edificio de levanta sobre roca.

El estudio ha aplicado en el análisis de la catedral técnicas novedosas para el cálculo de esfuerzos en los elementos estructurales. Según el informe, las inclinaciones de los pilares llegan hasta 50 centímetros y hay numerosas grietas entre las bóvedas y sus muros adyacentes.