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Los pescadores advierten que no cederán "ni un ápice" en la reunión convocada para hoy por Agricultura

La reunión convocada para hoy por el secretario general de Pesca, José Loira, se presenta complicada. Los pescadores advirtieron ayer que no están dispuestos a ceder "ni un ápice" en sus reivindicaciones y reiteraron su amenaza de cerrar los puertos a partir del martes "todo el tiempo que haga falta" hasta que se atiendan sus peticiones. Loira reiteró ayer su deseo de alcanzar un acuerdo para que la flota vuelva a faenar cuanto antes.

El presidente de la federación de cofradías de Guipúzcoa, Juan María Urbieta, recordó ayer que los pescadores de bajura llevan ocho días amarrados sin que la Administración haya hecho nada. "¿Cuántos plazos más quieren, si sólo se han preocupado de La Gabrielle [el pesquero francés capturado por los boniteros españoles] y no han hecho caso a nuestras peticiones?", informa Europa Press.

Los pescadores acuden a la reunión con Loira con la exigencia de que se prohíba el uso de redes de enmalle en las 12 millas nacionales y se garantice que tendrán que volver a puerto los pesqueros franceses con volantas de más de 2,5 kilómetros en el área de las 200 millas de uso comunitario (ZEE). Además, exigen que se cierre el paso a las importaciones de bonito francés, "para que se den cuenta de que si ellos tienen la fuerza en el mar, nosostros la tenemos en el mercado", afirma Urbieta.

El ministro de Asuntos Exteriores, Javier Solana, hizo ayer un llamamiento a "la calma y serenidad de todos", durante una conferencia de prensa convocada para presentar el plan de ayudas a Ruanda. Solana advirtió que los pescadores españoles tienen mucho que perder en este conflicto. "Nosotros pescamos en todos los mares y tenemos la mayor flota de Europa", dijo el ministro. Por ello, añadió: "Es en nuestro beneficio el que las reglas sobre la pesca se cumplan por todos y en todas partes". El titular de Exteriores advirtió que para poder exigir que se cumplan las normas comunitarias, tal como exigen los boniteros, hay que ser estrictos en su acatamiento, en clara referencia al arrastrero Francisco y Begoña, detenido por la Armada francesa.

"Las normas de la Unión Europea en materia de pesca hay que respetarlas, pero nosotros tenemos que respetarlas también porque de lo contrario no tendremos autoridad moral para exigir a los otros que las cumplan", afirmó Solana, quien no hizo mención alguna a la solicitud de ayuda financiera expresada por el armador del pesquero español apresado, Pedro Burgoa. Éste considera que la sanción impuesta por el tribunal correccional de Lorient es una respuesta política al conflicto por La Gabrielle y que, por tanto, no le corresponde a él abonarla. La Gabrielle arribó ayer a su puerto de amarre, en la isla de Yeu.

El Gobierno vasco también expresó ayer su preocupación por el agravamiento del conflicto y solicitó a las cofradías que hagan un esfuerzo negociador. El Ejecutivo autonómico entiende que es mejor llegar a acuerdos que intentar una solución rápida por la vía de la fuerza, pues de esa manera lo único que se conseguiría es perder la razón y la posibilidad de ganar en una larga batalla que dura ya varios años. "Es fundamental que negocien", declaró ayer el viceconsejero de Pesca José Ignacio Espel, "y que lleguen a acuerdos", informa Pedro Gorospe. El portavoz del Ejecutivo vasco se mostró de acuerdo con las protestas de los pescadores, pero en desacuerdo con la posibilidad de comenzar una campana de cierre de puertos comerciales.

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