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Años turbulentos en la aceitera

El Gobierno fracaso en su intento de hacer un gran grupo español

Con una facturación superior a los 60.000 millones de pesetas y una cuota de mercado del 15%, el grupo Elosúa-Carbonell constituye una empresa puntera en el mundo aceitero. Esta situación de peso en el sector, con la marca Carbonell como buque insignia, ha hecho del grupo Elosúa una empresa tradicionalmente apetecida por las principales multinacionales, aunque en los últimos años sus resultados hayan arrojado pérdidas. A grandes rasgos, la evolución de esta empresa se podría resumir así:1985. De Elosúa a Carbonell. A mediados de los años ochenta, con Carlos Romero como ministro de Agricultura y el actual titular Vicente Albero como director general de Industrias Agrarias, existía preocupación en el Gobierno por el desembarco de multinacionales en el sector aceitero. Romero logró que el aceite se calificara como sector estratégico. El grupo francés Lesieur, posteriormente adquirido por Ferruzzi, acababa de hacerse con el control de Koipe y el Banco Hispano ponía a la venta Carbonell. Agricultura dejó a un lado ofertas multinacionales como la de Unilever. El precio de Carbonell era de 4.500 millones de pesetas. Los Elosúa, una empresa familiar, y Aceites Pont recibieron para su compra un crédito del Banco de Crédito Agrícola, que supuso unas subvenciones de unos 2.500 millones.

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1989. Intrigas familiares. Sólo cuatro años más tarde, parte de la familia Elosúa decidió vender sus participaciones en la empresa a financieras como Fidinam y Paribas, en Suiza, que llegaron a tener el control del 29,5% de Elosúa Carbonell. No se conocía exactamente quiénes eran los compradores, aunque se sospechaba que detrás de la financiera se hallaba la multinacional italiana Ferruzzi, ya mayoría en Koipe al adquirir en Francia Lesieur. Ante esta situación, la empresa pública Mercasa, presidida por Jesús Prieto, se volcó en la compra de acciones hasta controlar el 27% de las mismas, lo que le permitió acceder a la presidencia a finales de 1989. Sin embargo, se mantenían los interrogantes sobre los planes del caballero blanco, que con el 29,541/6 de las acciones no daba aún la cara.

1991. Ferruzzi se descubre. En junio de 1991, Ferruzzi, con el BBV como socio en Koipe y con buenas relaciones con el Ministerio de Economía y Hacienda de Carlos Solchaga, pasó al ataque. La multinacional italiana hizo pública la compra del 24,9% de las acciones a las financieras Fidinam y Paribas por 7.022 millones de pesetas y lanzó una oferta pública de adquisición de acciones para comprar el 100% de la empresa.

El órdago de Ferruzzi causó sorpresa. Frente a esta ofensiva hubo dos posiciones claras. Desde Economía y Hacienda se mantuvo una actitud de silencio. Por el contrario, Agricultura lanzó una operación encabezada por el subsecretario Blanco Magadán en contra de la oferta. Se produjo un pacto entre Administración y Ferruzzi. Los italianos retiraron la OPA pero lograron el desembarco en el grupo. Fue un año de intrigas. Las acciones de Mercasa pasaron al Patrimonio, presidido por Luis Alcaide, y posteriormente al holding de aceite público Alycesa. Ferruzzi intentó, sin éxito, aumentar su participación en el grupo adquiriendo el 10% del Banco Pastor, porcentaje comprado finalmente a partes iguales por la Administración y Marcelino Elosúa a través de consejeros empresariales.

1992. Bendiciones y control para Ferruzzi. Junio de 1991 a julio de 1992 fue un periodo de largos debates, donde se produjo un profundo cambio de actitud en la Administración española. En este nuevo marco, en junio de 1992 se produjo el acuerdo entre Ferruzzi y la Administración -con Luis Alcaide en Patrimonio, Germán Calvillo en Tabacalera, Carlos Solchaga en Economía y Pedro Solbes en Agricultura- para el lanzamiento de una OPA sobre las acciones que se mantenían en Bolsa. Ferruzzi pasó a controlar el 36,8% y un porcentaje similar la Administración a través de Alycesa y Tabacalera, con el compromiso de no superar ambas partes el 40%. Actualmente, Marcelino Elosúa tiene el 20%, y el BBV el 5,8%.

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