El presidente catalán dice que no "mercadeará" con la cesión del IRPF para lograr una coalición

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, aseguró ayer en Madrid que nadie debe esperar una actitud de "mercadeo" por su parte para lograr un pacto de coalición con los socialistas en virtud de la cesión al Gobierno catalán de la gestión del 15% del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). Pujol volvió a reivindicar la existencia firme de un acuerdo-en ese sentido -extremo negado por el Gobierno central- y exigió su cumplimiento. "No tenemos que dar nada a cambio de eso", manifestó, y reiteró una afirmación que ha venido realizando durante las últimas semanas: "No quiero saber nada de coaliciones; el día que nos quieran dar algo ya nos avisarán".El presidente catalán intervino, junto al de la Junta de Andalucía, Manuel Chaves, en el acto de cierre del seminario que sobre la economía española se ha venido desarrollando desde el pasado martes en Madrid, organizado por el semanario británico The Economist.

"La doncella"

También estaba anunciada la presencia del lehendakari, José Antonio Ardanza, quien finalmente no compareció.

[El secretario de Estado para las Administraciones Territoriales, Francisco Peña, acusó ayer a la Generalitat de negarse "sistemática y tozudamente" a admitir un acuerdo conjunto entre el Gobierno y las comunidades autónomas sobre corresponsabilidad fiscal. Francisco Peña declaró a la agencia Efe que la Generalitat catalana "está obsesionada" con que el Ejecutivo sea el que decida sobre esta cuestión y lo haga para Cataluña, lo que, a su juicio, supondría una "grave irresponsabilidad" gubernamental].

Mientras, Manuel Chaves insistió en que la comunidad autónoma andaluza no va a permitir en ningún caso que la cesión a los Gobiernos autónomos del 15% del impuesto sobre la renta cree efectos discriminatorios de una región sobre otra y exigió que cualquier compromiso se haga "teniendo en cuenta la globalidad de la política de financiación de las autonomías".

Pujol aprovechó su presencia en Madrid para arremeter en una reunión con periodistas contra el presidente del Gobierno, Felipe González, por sus alusiones a un presunto riesgo para la unidad de España. "La doncella", dijo Pujol, "no necesita valedores" para asegurar a continuación que se está entrando en planteamientos "disparatados y peligrosos".

El presidente catalán señaló que, sin el autonomismo de Cataluña y el País Vasco, no se habría podido establecer en España el estado de las autonomías y exigió que el Ejecutivo central dé una máxima prioridad a la resolución de los problemas planteados en tomo a la financiación autonómica.

En el seminario organizado por The Economist, ante más de un centenar de directivos y hombres de negocios europeos, el presidente andaluz recordó en presencia de Pujol, pero sin dirigirse directamente a él, que la participación de las regiones en la construcción europea, debe hacerse, por lo que respecta a las comunidades autónomas españolas, sobre la base de la lealtad constitucional y se mostró radicalmente opuesto a que la explotación del "hecho diferencial" por parte de algunas comunidades pueda dar como resultado efectos discriminatorios' para otras.

"Desarrollo armónico"Manuel Chaves agregó que debe ser el Gobierno quien cuente con los mecanismos necesarios para "garantizar el desarrollo armónico de todo el Estado y para asegurar la solidaridad interregional".

Chaves indicó que existe un considerable "déficit democrático" en el proceso de construcción europea derivado en buena parte de la falta real de las regiones en el mismo.