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70 ONGD discuten en El Escorial sobre su formación y actuación futura

La importancia de la formación de cooperantes, tanto a nivel técnico como intercultural, para conseguir que las misiones en los países en vías de desarrollo se cumplan con éxito, es uno de los aspectos destacados por los representantes de 70 ONGD (Organización No Gubernamental para el Desarrollo), reunidos en El Escorial este fin de semana. El encuentro Recursos humanos en la cooperación internacional representa una puesta a punto del funcionamiento de la cooperación no gubernamental, con sus aciertos y errores. La tendencia de estas asociaciones se va perfilando cada vez más hacia una acción en la que no siempre hay que enviar a alguien a los países necesitados. "Ellos tienen sus propios expertos, y, en ocasiones, la única ayuda que debemos aportar, basados en un proyecto concreto, es de tipo económico, o de orientación técnica, o de formación en España de profesionales de esos países", afirma Juan Morello, secretario de la Coordinadora de ONGD.

Para los casos en que sea necesario el desplazamiento de voluntarios, los asistentes al encuentro han recordado la necesidad del respeto hacia las culturas receptoras, evitando comportamientos de superioridad técnica por parte de los cooperantes y comprendiendo las diferencias culturales dentro de "un trabajo en equipo, con diferentes aportaciones y una metodología compartida por receptores y donantes, para conseguir unos objetivos comunes", dijo Alegría Montzu, de Solidaridad Internacional. "En caso contrario, no podemos hablar de cooperación al desarrollo", añadió.

A diferencia de la cooperación oficial intergubernamental, las organizaciones no gubernamentales "se alimentan más de la mentalidad social, crean un ambiente de solidaridad, tienen una gran capacidad de flexibilidad y reacción ante nuevos acontecimientos", explica en Madrid María Victoria Morera, consejera técnica de la Oficina de Planificación y Evaluación de la Secretaría de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica, despacho de donde partieron el pasado año 2.024 millones de pesetas en subvenciones a las 121 organizaciones no gubernamentales españolas.

Cada vez más estas asociaciones tienden a volear sus esfuerzos en la sensibilización de la sociedad occidental hacia los problemas del Tercer Mundo. Fruto de esa mentalización, en el año pasado, llegaron a las ONGD 8.000 millones de pesetas en calidad de donativos.

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