A la inflación por la guerra
Los comerciantes eslovenos aprovecharon la crisis política y los conflictos bélicos para subir los precios de los artículos básicos entre un 10% y un 25% en menos de diez días. Sus ganancias aumentaron desproporcionadamente, ya que con el auge de los combates la población acaparaba los productos, almacenándolos para los tiempos de escasez. El Gobierno esloveno reaccionó, alarmado ante la subida de los precios, y decidió congelar los comestibles esenciales y bajarlos al punto que estaban antes de la intervención de las Fuerzas Armadas yugoslavas.La Cámara de Comercio eslovena advirtió que no sólo los conflictos paraban la producción. En varias empresas los expertos indispensables para el funcionamiento de las mismas fueron reclutados para luchar en la Defensa Territorial eslovena y el proceso de producción se vio seriamente afectado. La Cámara envió cartas a las diferentes asociaciones comerciales europeas pidiendo comprensión por los retrasos en el suministro de los productos, previamente acordados, debido a los conflictos y al cierre de las vías de comunicación.
El Gobierno estimó que los daños causados por la acción militar en esta república alcanzan los 2.700 millones de dólares. Las carreteras fueron seriamente dañadas, tanto por el paso de las columnas de blindados como por los combates sobre las mismas. Además, hubo pérdidas en el campo de la construcción, el turismo, el sistema de comunicaciones y en vehículos de transporte.