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EDUCACIÓN

Solana ve próximo un acuerdo sobre la asignatura de religión católica

El ministro de Educación, Javier Solana, manifestó ayer en Barcelona que ve con optimismo la posibilidad de alcanzar un acuerdo con el episcopado sobre la asignatura de religión y moral católicas. Los obispos insisten en que la materia sea evaluable, según la propuesta que estaba previsto que llegara ayer al Ministerio de Educación y Ciencia (MEC).

Fuentes gubernamentales consideraron ayer positiva la nueva propuesta de los obispos, en la que se pide que la asignatura tenga como alternativa no la ética, sino unas imprecisas actividades curriculares que significan de hecho una asignatura. Fuentes eclesiásticas, por su parte, expresaron que existe predisposición por parte de los obispos para llegar a un acuerdo con el ministerio del que es titular Javier Solana.El MEC plantea actualmente que la materia de religión no sea calificable y tenga como alternativa una hora, de estudio asistido. El anteproyecto de decreto, que desarrolla la Ley de Ordenación General del Sistema Educativo y recoge la propuesta ministerial, se encuentra en estos momentos en el Consejo Escolar del Estado. El texto puede ser objeto de modificación, aunque el problema está en la raíz de las diferentes interpretaciones de los acuerdos Estado español-Santa Sede: los obispos quieren un trato de asignatura fundamental y el MEC insiste en que la evaluación no tenga efectos oficiales, tal como Figura en el anteproyecto de decreto (ver EL PAÍS del pasado 6 de marzo). A este respecto, el ministro Javier Solana reiteró ayer que el MEC tiene intención de respetar los acuerdos citados y la Constitución.

Los obispos quieren que la alternativa a la clase de religión sea actividades curriculares, es decir asignaturas evaluables, con lo que, de hecho, se insiste en que también lo sea la materia en cuestión. Fuentes de la comunidad educativa expresaron su temor a que en esta negociación, más que la cuestión de la asignatura de religión, se esté negociando rebajar los requisitos mínimos -fijados en los decretos que desarrollan la LOGSE- para los centros privados.

Las mismas fuentes señalaron que el MEC quiere traspasar a la Conferencia Episcopal el pago de los salarlos a profesores de religión, lo que probablemente acepten los obispos que de esta manera gestionarán directamente esa partida. Hasta ahora se había solicitado que estos profesores fueran equiparados a funcionarios.

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