Standard Eléctrica pierde su liderato histórico como suministrador de Telefónica
El plan de compras de Telefónica para 1991 ha supuesto un vuelco en la relación de fuerzas de los tres grandes suministradores que operan en el mercado de conmutación pública. Por primera vez en la historia, Standard Eléctrica, hoy bajo la tutela del grupo francés Alcatel, pierde su liderato en favor de Ericsson-Intelsa. Al mismo tiempo, AT&T adquiere carta de naturaleza como tercero en discordia dentro de la tarta de Telefónica, que en 1991 será de 2,265 millones de líneas más otras 300.000 o 400.000 que quedarán pendientes de entrega durante este mismo año.Los contratos establecidos por Telefónica con sus tres principales suministradores se limitan a un total de 1,965 millones de líneas, en tanto que otras 300.000 serán adjudicadas en función al cumplimiento de las entregas ahora pactadas.
En un principio, el reparto se establece en 850.000 líneas para Intelsa, 810.000 para Standard Eléctrica y 305.000 para AT&T. Fuentes de Alcatel han reconocido que esta distribución supone un cambio cualitativo esencial en las relaciones comerciales mantenidas por Telefónica, si bien han añadido que el contrato suscrito con la empresa que gestiona el monopolio será ampliado en otras 190.000 líneas en el supuesto de que Standard asegure un cumplimiento satisfactorio de las entregas que han sido ahora acordadas.
Por otra parte, el consejo de administración de Telefónica ha aprobado un reajuste de sus órganos directivos que supone el nombramiento de Germán Ancoechea como consejero delegado. Asimismo, la Dirección General de Administración y Finanzas se desdobla en dos nuevas direcciones generales de Recursos y de Planificación Corporativa, que serán desempeñadas respectivamente por José Caballero y por Manuel Blanco Losada.
