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Centro derecha y socialistas se culpan mutuamente del retraso del plan para construir 18.000 viviendas sociales

La puesta en marcha del Plan 18.000, como se conoce al proyecto para construir otras tantas viviendas sociales, está a punto de convertirse en un nuevo frente de lucha en el Ayuntamiento de Madrid. El equipo de gobierno de centro derecha y el PSOE se han acusado mutuamente del retraso de unos cuatro meses que sufrirá el proyecto. Luis Álvarez, concejal del PP y presidente de la Empresa Municipal de la Vivienda (EMV), afirma que el PSOE puso en marcha el plan sin saber la situación registral y geotécnica de las parcelas. El socialista Jesús Espelosín dice que los estudios son una excusa para justificar el retraso.

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La puesta en marcha del Plan 18.000, como se conoce al proyecto para construir 18.000 viviendas sociales, está a punto de convertirse en un nuevo frente de lucha. El PSOE quiso despedirse del Gobierno municipal con la aprobación provisional de las condiciones del plan. El pliego debía ser sometido a un período de información pública- de ocho días, aunque los socialistas, según indicó Espelosín, se comprometieron no contestar a las alegaciones que se presentaran y dejar este cometido al centro derecha, a punto entonces de acceder al Gobierno municipal.El plazo fue considerado, sin embargo, insuficiente y prorrogado en 22 días. "No nos opusimos porque había tiempo suficiente para estudiar las alegaciones y llevar al pleno de julio la aprobación definitiva del pliego de condiciones y la apertura del período de cinco meses para la presentación de solicitudes. Así, las adjudicaciones podían hacerse en diciembre" afirmó Espelosín.

Sin embargo, el pliego de condiciones para, el concurso aún no ha sido aprobado. "La aceptación o rechazo de las alegaciones presentadas se verá en la próxima Comisión de Urbanismo" ' afirmó el concejal del PP Luis Álvarez, presidente en flinciones de la EMV. Para Álvarez la cuestión no es que se apruebe o no el pliego de condiciones, sino que antes de que las cooperativas presenten sus solicitudes se aclare la situación de las 228 parcelas que serán cedidas y vendidas.

Con este objetivo, en agosto, y con la ausencia por vacaciones de los dos consejeros socialistas, el consejo de la EMV encargó un estudio jurídico de los terrenos previstos, que son de muy diverso origen: municipales, procedentes de convenios entre el Ayuntamiento y particulares y consecuencia de expropiaciones. Asimismo el consejo pidió un estudio geotécnico de las parcelas.

Según Álvarez, ambos estudios estarán terminados en noviembre. "Será entonces cuandosabremos cuántas parcelas pueden ofrecerse con garantías para los cooperativistas. El plazo para presentar solicitudes hará que los terrenos no puedan ser entregados hasta finales de abril", agrega el político consevador.

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Espelosín, responsable de Urbanismo en el PSOE, indicó que todos los grupos sabían que el suelo del Plan 18.000 no está inscrito en el Registro de la Propiedad y una parte ni siquiera es todavía del Ayuntamiento. "El objetivo era ofrecer suelo inmediatamente para que los cooperativistas pudieran comenzar la tramitadión de créditos y la redacción del proyecto. El suelo está perfectamente determinado, independientemente de si ya es municipal o va a recibirse dentro de año y medio. Si el objetivo fuera ofrecer suelo inscrito y vallado, habría que esperar a 1991", dijo Espelosín.

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